Existen vías de
tráfico ilegal de residuos de Europa a países de renta baja de
Asia y África. Lo hizo público el parlamento holandés en un informe en 2008 a raíz de uno de los casos más sonados de esta actividad delictiva: el envío, en 2006, desde Holanda a Costa de Marfil, de residuos tóxicos incumpliendo normas de control, un envío que afectó a100.000 personas en el país africano, de las que 16 murieron por envenenamiento. La rentabilidad de esta negocio reside en hacerse adjudicatario de la gestión de residuos, y obviar la normativa en esta materia ahorrando costes. Después,
se introduce la mercancía en los círculos comerciales en los países de destino, en lugar de destruirlos, como sería lo preceptivo. La tasas aduaneras se reducen al declararse el material como residuos.
Un proyecto de refuerzo
Ahora, el proyecto 'Tecum', impulsado por la Unión Europea, perseguirá a las organizaciones criminales implicadas en este tráfico. Se trata de un plan a tres años, que se erige sobre una operación policial conjunta en todo el ámbito europeo contra el tráfico ilegal de residuos, y al que se invitará a sumarse a países receptores de esos desechos, como Costa de Marfil, Ghana o Nigeria. pretende identificar las vulnerabilidades legislativas en el sistema, que lo hacen poroso a la delincuencia, así como fomentar la investigación.
En la operación participan instituciones europeas como
Europol,
Cepol o
Eurojust, aunque son los
Carabineri italianos los que la lideran debido al protagonismo de la camorra italiana en este lucrativo negocio ilícito. La camorra ha llegado a hacerse con la gestión de los residuos en Nápoles y ha llevado a cabo vertidos incontrolados en la región de Campaña, contaminando los suelos de la zona.
El seprona en España
En el marco de esta operación, en nuestro país, el
Seprona de la Guardia Civil investigará sus consecuencias medioambientales. Si bien España no sufre un problema grave de bandas organizadas en este territorio, sí se han abortado la exportación desde puertos como el de Algeciras de motores usados de vehículos sin descontaminar, es decir, residuos peligrosos, a Nigeria, Ghana o Egipto; o de neumáticos desde Zaragoza a Guinea Ecuatorial o Mali.
