Este viernes la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sido entrevistada en ‘Espejo Público’ y como viene siendo costumbre, la candidata del Partido Popular ha dado de qué hablar por sus descalificaciones a los diferentes líderes de izquierdas.
En concreto, en esta ocasión Ayuso ha cargado con todo contra el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. “Yo creo que es el mal y lo he dicho siempre. No me parece una buena persona, me parece alguien que ha vivido siempre de lo público pero para perpetuarse, que nació con unos discursos radicales, que bebió del chavismo, que nació de las televisiones en Venezuela, como hemos visto todos, que su partido desde lo ético, desde lo político y desde lo económico se nutrió de las peores dictaduras, de las pocas que quedan en el mundo”, ha indicado la presidenta madrileña.
“Es una persona que alienta las algaradas callejeras, romper escaparates a los comerciantes, que hablaba de los escraches, de las guillotinas, que habla además siempre con esa rabia contenida, que siempre está mintiendo, que dice representar a un pueblo que cada vez es más lejano a él, que vive con una opulencia tremenda, que ha triplicado su patrimonio en muy poco tiempo. Es una persona falsa, que hablaba de su querido Vallecas que luego abandonó…”, ha seguido criticando Ayuso.
Un alegato que la presentadora del programa, Susanna Griso, ha optado por cortar por todo lo sano, después de la lluvia de exabruptos de Ayuso. "No siga usted, porque en fin...”, ha señalado la periodista. “A mí me parece que eso es él”, ha añadido la dirigente popular.
“Ya, pero decir que es el mal es tanto como decir que es el demonio, seguro que hay otra manera de expresarlo”, ha lamentado Griso. Sin embargo, la presentadora no ha conseguido hacer recapacitar a Ayuso, que ha seguido en sus trece. “A mí me parece que habla de la guillotina de esa manera, que miente de esa manera... el otro día le dieron a elegir entre libertad o comunismo y dijo comunismo. Es que cuando yo escucho el testimonio de tantas personas afectadas por su forma de gobernar en otros países, cuando escuchas a tantas personas que vienen de Europa del Este, o de Latinoamérica y te cuentan cómo entran en las instituciones de manera democrática pero sin ley... sí que pienso que es mala persona”, ha zanjado.