Mientras un gran número de personalidades de todo el espectro político se han unido para condenar casi unánimemente los comportamientos machistas del presidente de la RFEF, Luis Rubiales, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso y el alcalde capitalino, José Luis Martínez-Almeida, han optado por otra estrategia: el silencio. El escándalo de Rubiales ha llegado hasta la prensa internacional y se han hecho eco del mismo medios y políticos de muchos otros países, que han condenado la actitud del ya inhabilitado como dirigente de la RFEF. Sin embargo, no ha sido ese el caso de los dirigentes 'populares', que no han pronunciado o escrito una sola palabra al respecto. De ello se ha dado cuenta el diputado de Más Madrid Hugo Martínez Abarca, quien ha hecho una reflexión que implica al alcalde de Londres, Sadiq Khan, y que deja en evidencia a los mandatarios madrileños. 

Luis Rubiales ha sido, con diferencia, la figura más protagonista de la semana. A su larga ristra de escándalos previos, hay que sumar los comportamientos machistas que protagonizó durante la final del Mundial femenino: se agarró la entrepierna en el palco en presencia de la reina Letizia y la infanta Sofía, besó sin consentimiento a Jennifer Hermoso, cogió a hombros a Athenea del Castillo y besó en la cara a Olga Carmona, conductas poco justificables en un dirigente de Federación. Lejos de rectificar y de reconocer sus errores, Rubiales dio una infame entrevista en la Cadena COPE, donde llamó "tontos del culo" a todos los que le señalaron sus actitudes. Menos de 24 horas después daba un comunicado verbal disculpándose, en un discurso en el que no pedía perdón por lo que había hecho, sino porque le habían visto haciéndolo. Y el viernes puso la guinda a un ya esperpéntico pastel con su intervención en la Asamblea General Extraordinaria de la RFEF, donde soltó perlas tales como que el "falso feminismo" era el culpable de lo que le estaba pasando, que iba a emprender acciones legales contra Yolanda Díaz, Pablo Echenique, Ione Belarra e Irene Montero, que le pidió 'un piquito' a Jennifer Hermoso y que ella le dijo "vale" (cosa que la propia jugadora ha desmentido) o que no iba a dimitir porque estaba siendo víctima de un "asesinato social". 

Tan lamentable ha sido esta sucesión de comportamientos que el caso ha traspasado fronteras, y diferentes medios internacionales han tachado el devenir de Rubiales como "una auténtica vergüenza para el deporte español". Sin embargo, algunos no se han enterado (o no se han querido enterar) en el interior de nuestras propias fronteras. Ha sido el caso de Isabel Díaz Ayuso y de José Luis Martínez Almeida, a quienes se le ha adelantado hasta el alcalde de Londres, Sadiq Khan, en dar su gesto de apoyo a Jenni Hermoso y a la Selección española tras lo ocurrido.

Así lo ha recogido el diputado de Más Madrid, Hugo Martínez Abarca: 

 

"Ha salido a defender a las españolas antes el alcalde de Londres que el alcalde y la presidenta de Madrid". Una frase breve, pero muy reveladora: mientras que otras figuras del Partido Popular sí han lanzado mensajes en apoyo a Jennifer Hermoso, Ayuso y Almeida se han alineado con Vox en esta cuestión al guardar completo silencio y correr un tupido velo ante las actitudes machistas del dirigente de la RFEF. Tampoco han hecho ninguna intervención ante la prensa en el tiempo que ha durado este escándalo, por lo que tampoco han podido ser preguntados al respecto.

Rubiales, inhabilitado por la FIFA

En medio de una creciente ola de críticas y descontento, la imagen del fútbol español sigue su vertiginoso declive bajo el liderazgo de Luis Rubiales, quien, sigue empeñado en echar un pulso a toda España pese a que sus apoyos cada vez son menores. En este sentido, el presidente de la Federación ha sido suspendido provisionalmente de toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional por la Comisión Disciplinaria de la FIFA. Esta suspensión, efectiva a partir de este mismo sábado, se extenderá por un periodo inicial de 90 días, mientras se lleva a cabo el procedimiento disciplinario en su contra.

"El presidente de la Comisión Disciplinaria de la FIFA, Jorge Ivan Palacio (Colombia), en uso de las facultades otorgadas por el artículo 51 del Código Disciplinario de la FIFA (CDF), ha acordado en el día de hoy la suspensión provisional del Sr. Luis Rubiales de toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional", ha indicado en una nota de prensa el máximo organismo futbolístico a nivel mundial, en respuesta a la bochornosa conducta de Rubiales después de la final del Mundial femenino en la que España consiguió su primera estrella al imponerse a Inglaterra (1-0).

Sin embargo, la decisión de la Comisión Disciplinaria de la FIFA no solo se limita a la suspensión de Rubiales de toda actividad futbolística a nivel nacional e internacional, sino que también incluye órdenes explícitas relacionadas con el comportamiento hacia la jugadora de la selección española, Jennifer Hermoso. Jorge Ivan Palacio, presidente de la Comisión Disciplinaria, ha emitido directivas estrictas en las que Rubiales y su círculo cercano se les prohíbe de manera tajante cualquier contacto, tanto directo como a través de terceros, con Jennifer Hermoso y su entorno más próximo.