La actriz de Hollywood Emma Thompson ha recibido múltiples aplausos y ovaciones gracias a sus últimas palabras sobre la presión que ejercen las redes sociales sobre el cuerpo y la imagen de las mujeres. "A las mujeres nos han lavado el cerebro toda nuestra vida para odiar nuestros cuerpos".

La intérprete de múltiples películas de renombre como Love Actually lanzó esta reivindicación feminista durante la rueda de prensa del Festival Internacional de Cine de Berlín (Berlinale) para presentar Good luck to you, Leo Grande, una nueva cinta dirigida por Sophie Hyde. Thompson se pone en la piel de una mujer de 55 años viuda, que quiere volver a redescubrir su vida íntima, por lo que contrata a un trabajador sexual. 

En la película pueden verse varias escenas de desnudo, motivo por el cual la actriz se ha pronunciado de esta manera. "Yo no puedo pararme delante de un espejo así. Siempre hago algo, me giro... Hago algo. No puedo quedarme quieta. ¿Por qué lo iba a hacer? Es horrible. Pero ese es el problema: a las mujeres nos han lavado el cerebro durante toda la vida para que odiemos nuestros cuerpos", explicaba, aludiendo a la escena en la que tuvo que mirarse frente al espejo completamente desnuda.

"Todo lo que nos rodea nos recuerda lo imperfectas que somos y que todo está mal en nosotras. Tienes que mostrarte de una determina manera", continuaba detallando. "Intenta ponerte frente a un espejo y no moverte. Solo aceptar y no juzgar... es lo más difícil que he tenido que hacer. Hice algo que no había hecho nunca como actriz", insistía recordando el rodaje.

La importancia de los cuerpos reales, sin estereotipos

Con este discurso, Emma Thompson, como tantas otras voces relevantes como Kate Winslet y su también escena de desnudo en la serie Mare of Easttown, han querido reivindicar en múltiples ocasiones la importancia de los cuerpos reales, sin filtros, sin retoques, sin estereotipos, públicamente. "Nada ha cambiado en las terribles peticiones que se hacen a las mujeres en el mundo real y en la actuación. Lo de tener que ser delgada sigue siendo la misma que ha sido siempre, y en algunos aspectos creo que es aún peor ahora", declaró la británica durante el Festival de Sundance.

Asimismo, también admitió que no habría sido capaz de mostrar completamente su desnudez hasta este momento, a sus 62 años. "Y aún así, por supuesto, mi edad actual lo hace extremadamente desafiante porque no estamos acostumbrados a ver cuerpos al natural en la pantalla", reconoció.