El fin de año suele ser una época donde se echa la mirada atrás y llega el momento de premiar a aquellos que mejor han trabajado por fomentar la industria en la que participan.

En el caso de los esports no es menos y a los Esports Awards, Game Awards o Joystick Awards se suma la ceremonia de Mahou Esports Community Awards.

La gala de la Liga de Videojuegos Profesional (LVP) realiza su primera edición con 10 categorías que premiaron a los mejores evangelistas de la industria.

Con sus casters de confianza, los premios fueron anunciando cada uno de los elegidos por la comunidad como referencia de 2021.

Las nominaciones tuvieron gran variedad, pero si hay que destacar a los grandes protagonistas de la noche, no cabe duda que fueron Ibai Llanos y Esportmaniacos.

Empezando por el vasco, éste se llevó el premio a creador de contenido del año y el galardón a la acción solidaria del año con su stream benéfico por el volcán de La Palma.

En el caso del medio especializado en deportes electrónicos, lograron hacerse con el título de mejor programa de entretenimiento del año, en referencia al contenido que realiza Esportmaniacos en Twitch donde ponen la actualidad de la escena diariamente y el trofeo a mejor periodista del año recaló en su director, Guillermo Yuste que, aparte de liderar el proyecto, ha sido vanguardia y uno de los profesionales que se ha hecho eco de algunas de las exclusivas más sonadas en 2021.

Entre ellos, se hicieron con 4 de las 10 categorías de toda la gala. Respecto al resto, MisterJägger recibió el premio por el meme/tuit del año por su video en la previa de La Velada del Año con su ª, MAD Lions recibió el de club de esports con mayor proyección, Skain por mejor cuenta en redes sociales, G2 Esports recibió el premio a mejor equipación de esports, Champi fue galardonado por su outfit en la final de la Superliga como el mejor, Ángel Martín la personalidad outsider del año y Virginia Calvo recibió el premio honorífico de la gala por su trayectoria profesional y fomento del ecosistema de los deportes electrónicos.

Con este último galardón se cerró la primera ceremonia que augura una larga historia a futuro donde podremos encontrar nuevas categorías y un mejor revestido para otras ocasiones que, si la pandemia lo permite, llegue incluso a hacerse de forma presencial.

Como no cabía esperar de otra manera, las redes se llenaron de comentarios positivos, de haters y aquellos que no les quedó otra que aplaudir el galardón de los premiados. Estas reacciones y resultados dejan la evidencia de una puesta en escena que vuelve a lograr la LVP con otro de sus eventos gestados.

El trayecto de la designación de Mediapro se ha convertido en referencia directa de los esports en España y su público así lo ha reconocido. Desde el empleado más raso hasta una directiva liderada por Jordi Soler se demuestra que la ambición por englobar cada uno de los deportes electrónicos más representativos se materializan a la hora de emitir la competición desde sus canales oficiales.

De esta forma, el resultado no tiene otra forma más que exitoso y emblemático para la comunidad. Es por ello que era inconcebible que no existiese una gala que pudiese abanderar a los elementos que giran en torno a la creación de contenido (periodística u ociosa), clubes y elementos que hacen posible su evolución a diario.

Una de las frases más recurrentes por los que trabajan en esta profesión es que los esports y la vida de los perros es muy similar ya que en cualquier otro sector, lo que es un año cumple el mismo trayecto que uno natural (a nivel de progresos profesionales), en el caso de los deportes electrónicos, este mismo periodo, hace que la industria desarrolle mucho más rápido elementos que la optimicen y alcen su dinámica.

Asimismo, 2021 ha cumplido con las expectativas de este dicho y se espera un curso que bien puede traer novedades que no sólo afecten a la LVP, sino a los esports en general. El tiempo dirá si el rumbo que tomen será el correcto y si los premiados de esta última ceremonia serán capaces de revalidar el galardón o habrá nuevos figurantes que hayan reventado la escena futura.