¿Eres de esas personas que dicen: “Yo al trabajo voy a trabajar, no a hacer amistades?”. Esperamos que no, porque podrías estarte perdiendo la oportunidad de disfrutar mucho más. Según una investigación de Gallup, quien tiene un amigo [o amiga] en el trabajo, tiene un tesoro.
Además, esta afirmación de que quien tiene un amigo en el trabajo tiene un tesoro, parece estar siendo cada vez más real y más relevante. Según Gallup, “tener un mejor amigo [o amiga] en el trabajo se ha hecho más importante desde el comienzo de la pandemia, incluso considerando el dramático crecimiento del teletrabajo y las formas híbridas de empleo”.
Contar con apoyo social y emocional es más crítico que nunca
El tesoro de tener un amigo en el trabajo
Gallup identifica “varios factores detrás de la creciente importancia de tener un(a) mejor amiga(o) en el trabajo. Para muchas personas, la pandemia provocó experiencias traumáticas y otras dificultades profundas, en especial para profesionales de los cuidados de salud y otras primeras líneas, como la educación”.
El estudio se ha realizado a partir de una encuesta a 15.536 personas. De sus respuestas se concluye que “contar con el apoyo social y emocional de tu mejor amiga(o) en el trabajo es más crítico que nunca para superar estos tiempos de retos”.
Contar con ese tipo de relaciones en el entorno laboral da buenos resultados
Impacto positivo
La investigación señala cinco puntos en los que se aprecia el impacto de contar con esa persona especial. Para empezar, se genera más compromiso, tanto con los clientes, como con otros miembros de la plantilla con quienes tienen que colaborar. Además, se consigue hacer más en menos tiempo.
Y no solo eso, también se producen menos accidentes y se genera mayor innovación al compartir más ideas. Y, en general, se crea un ambiente en el que hay mayor diversión.
Hay que generar ejemplos para que se fomenten esas relaciones
Fomentar la amistad
Por tanto, Gallup recomienda generar este tipo de conexiones. Algo en lo que juegan un papel fundamental quienes lideran los equipos y las organizaciones. De esa forma, se genera un ejemplo a través del cual el resto de profesionales entienden que está bien fomentar ese tipo de amistades en el entorno laboral.
Pero también es fundamental generar tiempos y espacios para que se produzcan y se mantengan esas relaciones. “Las estructuras de los equipos, los flujos de trabajo y otros sistemas y prácticas pueden crear o destruir la capacidad de los empleados para desarrollar amistades reales” en el entorno laboral.
Algo que no se puede producir si no existe “una atmósfera que promueva la confianza y la colaboración”. Por eso, quienes lideran deben animar al resto del equipo a buscar amistades e incluso crear eventos sociales que incrementen las posibilidades de que suceda.
También significa fomentar la comunicación y las conexiones. Esas conversaciones pueden tener un impacto positivo adicional, puesto que “a través de la conversación, los empleados que son mejores amigos pueden ser su verdadero yo y apoyarse unos a otros”.
“Cuando los profesionales tienen amistades genuinas, tienen a alguien que los hace sentir incluidos y cuidados. Alguien con quien pueden mostrarse vulnerables”. Y, como “no quieren defraudarlos, dan la cara por ellos en su desempeño y asumen papeles para apoyarlos. Les cubren la espalda, ya sea al priorizar la seguridad o al apoyarlos en los proyectos”.
Según Gallup, “este tipo de apoyo es más crucial que nunca en los entornos laborales post pandemia, en los que muchos empleados soportan mayor carga emocional y están más distanciados físicamente. Los trabajadores necesitan, no solo apoyo social, sino también confianza y conexión con su cultura”.
Por eso, “contar con un(a) mejor amigo(a) en el trabajo ayuda incluso al trabajador más remoto a mantenerse comprometido y enganchado, lo que los impulsa a hacer esfuerzos excepcionales, sean cuales sean los retos que aparezcan”.