Si eres del tipo de persona que dice eso de “me gustó más el libro”, aquí te traemos las cinco mejores adaptaciones al cine de novelas de ciencia ficción, las más telescópicas, las que -como frikis nivel titán que somos- más volvemos a ver en cuanto no encontramos nada interesante en Netflix, HBO, Amazon Prime, Disney+, Movistar o el resto de plataformas de contenidos [que es todos los fines de semana].

Estas cinco adaptaciones al cine de novelas de ciencia ficción no solo son las mejores, sino que te garantizan que vas a pasar un buen rato descubriendo significados ocultos, referencias y, con el paso de los años, predicciones que nunca se llegaron a hacer realidad. Allá vamos.

Los vehículos voladores de Blade Runner ya son reales

Blade Runner [la original, no la nueva]

Para algunas personas, no se trata de una adaptación realmente, porque se distancia mucho de la novela original, Do Androids Dream of Electric Sheep? Esta es una de esas en las que puedes ver cómo a veces nos pasamos con el optimismo con respecto a las tecnologías. La mayoría de las que verás en ella no se han hecho realidad.

Pero, por ejemplo, sí que ahora nos parecen de lo más normal las videollamadas y hay empresas como UMILES Next que ya han realizado con éxito pruebas de un dron de transporte de pasajeros. Es decir, que lo de ver vehículos sobrevolando las ciudades puede no estar tan lejos. Ah, por cierto, como explica Carlos Poveda, CEO de la compañía, "es la primera aeronave fabricada en España con talento y capital español".

Blade Runner sigue siendo un clásico que va más allá de la ciencia ficción y reflexiona sobre los grandes problemas de la Humanidad: las desigualdades, el efecto negativo de nuestra actividad sobre el planeta, la religión, la guerra y muchos otros.

Y, por supuesto, siempre es un placer volver a escuchar a Rutger Hauer [Roy Batty en la película] decir aquello de “todo eso se perderá, como lágrimas en la lluvia”.

Poner a trabajar juntos a Arthur C. Clarke y a Stanley Kubrick es garantía de que va a nacer una verdadera joya

2001: Una odisea del espacio

Claro, poner a trabajar juntos a Arthur C. Clarke y a Stanley Kubrick es garantía de que va a nacer una verdadera joya. Ambos partieron de la base de un relato del escritor, The Sentinel, y el guion y la novela se fueron escribiendo en paralelo, aunque hay muchas diferencias entre ambos.

Clarke es uno de los grandes genios del género. Te recomendamos que “revisites” el reportaje que publicamos aquí sobre él, en el que incluimos una entrevista en la que anticipaba un montón de innovaciones que hoy utilizamos cada día.

En cuanto a la película, es verdad que hay que echarle un poco de paciencia, porque no es tan obvia ni se rige por los códigos habituales del género. Sin embargo, sigue siendo una obra maestra en todos los aspectos, incluido -por supuesto- el de la banda sonora.

The Martian tiene significados diferentes según en qué momento te encuentres tú

The Martian

Una vez más, una obra maestra de la literatura y del cine. Tanto la novela como su adaptación a la gran pantalla son un alarde de conocimiento y capacidad narrativa.

Como no podía ser  de otra manera, subyacen las grandes cuestiones que afectan al ser humano contemporáneo. Puedes verla o leerla desde diferentes perspectivas, según cuál sea tu estado de ánimo o las preocupaciones que tengas en cada momento. de hecho, en momentos diferentes tienes percepciones diferentes.

La aventura en solitario, como Robinson Crusoe o incluso otros clásicos del género, como Silent Runners [Naves silenciosas], siempre ha sido una excelente excusa para poner en valor las cosas que damos por sentadas en nuestro día a día en los países desarrollados, como abrir un grifo y que salga agua o poder comer cada día un plato diferente.

Hoy en día se sigue estudiando en las facultades de todo el mundo

Metropolis

Ya sabemos que cuesta hacerse a la idea de dedicarle tiempo a algo que tiene casi un siglo. Pero, en este caso, te aseguramos que merece la pena. En 1925 se publicó el libro, firmado por Thea Von Harbou. Una de esas obras absolutamente olvidadas e infravaloradas de manera injusta.

Sin embargo, su marido, Fritz Lang, supo apreciar el valor de aquellas páginas y la llevó a la gran pantalla. En su caso, sí consiguió el reconocimiento merecido y hoy en día se sigue estudiando en las facultades de todo el mundo.

En teoría, el metraje tendría que haber sido de 153 minutos, pero los recortes presupuestarios, los de la censura y los de los propios exhibidores la dejaron en 90 minutos.

Debería haber sido la clásica novela juvenil, pero es algo mucho más grande

Los juegos del hambre

Lo que debería haber sido la clásica novela juvenil para que pasasen el rato un montón de adolescentes, se ha convertido en algo mucho más grande. Y no se puede negar que gran parte de la culpa la tienen tanto su calidad literaria, como la cinematográfica.

Una franquicia que, como muchas otras, comienza siendo una maravilla y poco a poco va perdiendo fuelle por culpa de esa máxima de Hollywood [y el mundo editorial] de “si tienes un personaje que funciona, explótalo al máximo”.

A pesar de sus limitaciones y de que en algunos momentos puede parecer demasiado ñoña, en diferentes niveles de lectura y visionado te encuentras con reflexiones tan profundas como las de cualquier gran obra. Solo es cuestión de acercarse a ella sin prejuicios… como casi todo.