El Real Madrid aterriza en Atenas para medirse este miércoles a un Olympiacos que buscará dar la sorpresa ante su afición. Las dudas rodean al conjunto blanco tras empatar ante el Elche en el Martínez Valero en un mal partido de los de Xabi Alonso, repleto de imprecisiones y sin chispa. En ese clima de incertidumbre, emerge la figura de José Luis Mendilibar, un veterano y viejo conocido de los banquillos españoles que ahora dirige al conjunto griego, decidido a aprovechar la fragilidad mostrada por los merengues en los últimos encuentros.

Mendilibar ha hecho de su Olympiacos un equipo que ha recobrado la identidad, fe y ambición de tiempos pasados. En un escenario cargado de presión para los blancos, el estratega vasco aspira a convertir la crisis madridista en su mejor aliado. Desde su llegada a Atenas, Mendilibar se ha ganado el cariño de su afición a base de resultados, logrando el primer título europeo de la historia de la entidad de El Pireo: la UEFA Conference League en 2024.

En la rueda de prensa previa al partido ante el Real Madrid, el técnico de 64 años no se mordió la lengua. Al ser preguntado por cómo frenar a Kylian Mbappé, la gran estrella del equipo de Alonso, respondió tirando de ironía: “Está parado, ¿no? Si lleva tres partidos sin marcar, ya está parado. Pues que siga así”.

No reparó en elogios para el club blanco: reconoció la superioridad individual de su plantilla, aunque añadió que la clave para incomodarlos reside en la concentración y en aprovechar sus errores. Sobre el técnico blanco, Xabi Alonso, comentó: “Xabi está fuerte dentro del club. No va a tener ningún problema para poder seguir y dar todo lo que tiene. Es un grandísimo entrenador y lo ha demostrado”.

También analizó el momento actual del Madrid, admitiendo su respeto, pero también su convicción de que el Olympiacos puede competir: “Si el Madrid juega bien, es casi imposible ganarle. Tiene grandísimos jugadores, de los mejores del mundo. Debes intentar que no lo hagan bien y tú no cometer ningún error. Es un partido complicado… no nos darán ninguna facilidad y lo vamos a tener que ganar nosotros. Estamos bien, pero cuando nos enfrentamos a rivales como el de mañana, debemos estar muy concentrados los 90 minutos, aprovechar las ocasiones que tengamos y hacer lo que creemos”, aseveró.

Mendilibar: humildad, pasión y coraje

Antes de convertirse en la esperanza griega, José Luis Mendilibar fue uno de los entrenadores más reconocidos —y sufridos— del fútbol español. Nacido en Zaldíbar, arrancó trabajando en las categorías inferiores del Athletic Club y fue escalando en clubes modestos hasta labrarse una reputación de trabajador incansable, especialista en sacar lo máximo de plantillas limitadas. Su paso por clubes como el Eibar lo consolidó como un técnico de convicciones firmes, capaz de mantener al club en Primera con recursos muy reducidos. Esa experiencia forjó su estilo: pragmático, intenso, de desgaste físico y mental, con pocos adornos, pero eficaz.

Después llegaron retos mayores. Mendilibar pasó por equipo tras equipo hasta que, tras ganar la UEFA Europa League con el Sevilla, dio el salto fuera de España: en febrero de 2024 firmó por Olympiacos. En Grecia ha renacido. Bajo su mando, Olympiacos recuperó títulos: conquistó la UEFA Europa Conference League (primera gran corona europea del club) y alzó liga y copa nacionales en 2025.

Ese éxito le ha ganado el corazón de la afición: en El Pireo lo llaman ya “su hombre”, un entrenador que respeta los valores, apuesta por el esfuerzo colectivo y nada tiene que ver con los “galácticos” o el fútbol de glamour. Su llegada devolvió identidad a un equipo acostumbrado a sobornos, crisis y decepciones. Para el Madrid, ese pasado de “técnico del barro” es una advertencia: Mendilibar convierte cualquier partido en un reto físico, táctico y emocional. Y si hoy a los blancos les falla algo, sea confianza, coordinación o fiabilidad, el entrenador vasco ya sabe cómo hacer daño.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio