Reino Unido ha sufrido un desplome histórico de su actividad en el segundo trimestre del año, en concreto una caída del 20,4% del Producto Interior Bruto (PIB) con respecto al trimestre anterior, según los datos publicados por la Oficina Nacional de Estadística. Por primera vez desde 2009, la economía británica entra en recesión, provocada por el impacto del coronavirus.

Por sectores, la actividad del sector servicios cayó un 19,9% por la pandemia, la agricultura redujo su actividad un 4,8%, el sector manufacturero se desplomó un 20,2% y la construcción perdió un 35% en el segundo trimestre.

Se trata del peor desplome económico entre las economías desarrolladas, todas ellas afectadas por el coronavirus. El desplome de la economía británica supera la caída del 18,5% del PIB español, del 13,8% en Francia y del 12,4% en Italia.

A pesar del desplome en niveles récord, el organismo asegura que la economía empezó a recuperarse en junio con la reapertura de tiendas, el aumento de la producción en el sector industrial y la recuperación e la construcción. "A pesar de esto, el PIB en junio todavía se mantiene un sexto por debajo de su nivel en febrero, antes de que atacara el virus", reconoce Jonathan Athow, estadístico del organismo oficial.

En cifras, el PIB británico registra un rebrote del 8,7% en junio por relajarse las medidas de restricción por la pandemia, después de crecer un 2,4% en mayo y haber caído un 20% en el mes de abril.

A nivel laboral, el impacto del coronavirus ha provocado la pérdida de 220.000 empleos en el segundo trimestre en Reino Unido, la mayor caída de este periodo desde 2009 según la ONS. Sin embargo, la tasa de paro se mantuvo en el 3,9% por las medidas de suspensión laboral implantadas por el Gobierno.