El 52% de los niños españoles destinan entre uno y siete días de atención a los juguetes nuevos, según ha revelado el Informe sobre el Juego Infantil en España de Aldi. Además, refleja que el 20% los utiliza entre una semana y un mes, el 16% lo hace de un mes a un año entero y solo el 12% de los pequeños presta atención a sus juguetes nuevos durante más de un año.

El estudio ha sido elaborado a través de una encuesta a 500 familias españolas y de una dinámica grupal con cuatro familias dirigida por el psicólogo infantil Alberto Soler. El objetivo era conocer cómo juegan los más pequeños y reivindicar su derecho fundamental a jugar y divertirse.

En cuanto al tiempo que los niños pasan jugando, el 60% dedica cada día entre una hora y media y dos horas a jugar. Los resultados también revelan que las otras actividades favoritas de los más pequeños son ver la televisión (66%), hacer deporte (58%) o dibujar (53%), que ocupan diariamente entre media hora y una hora y media de su tiempo.

La encuesta pone de manifiesto que el 56% de las familias españolas busca que los juguetes sean educativos, así como que fomenten su creatividad e imaginación. En una escala de valor del 0 al 10, los padres españoles valoran con un 9 que sean seguros; con un 8 que sean divertidos, educativos y creativos; dan un 7 a que sean sociables y un 6 a que tengan un componente deportivo.

En el lado opuesto, los atributos menos buscados por las familias son la estética (6), la tecnología (4) y/o que estén relacionados con personajes de televisión o películas (4).

Compañía de familia y amigos

Por otra parte, el 70% de las familias considera que la compañía de padres y madres es primordial a la hora de jugar, aunque un 49% también defiende que sus hijos necesitan amigos para jugar. En este caso, más de la mitad afirma que los espacios al aire libre como el colegio, el parque y la calle son los espacios favoritos para el juego.

Para la mayoría de los niños españoles, el parque y el salón de casa son los espacios más comunes. En concreto, un 81% de las familias apunta que sus hijos suelen jugar en parques y un 80% en el salón de su casa. Del mismo modo, un 66% destaca que el lugar más común de juego es el colegio, un 49% la habitación y un 42% en la calle.

Según se desprende del estudio, la tendencia general es jugar en espacios habilitados para ello. No obstante, según los datos analizados se observa una diferencia en cuanto a los lugares más habituales de juego de los niños según el lugar de residencia. Por ejemplo, los niños que viven en poblaciones más pequeñas de 20.000 habitantes juegan más en la calle y en una sala de juegos que en casa.