Panel informativo de la Bolsa de Madrid que muestra el valor de la prima de riesgo en los países de la zona euro. EFE



Pese a que este miércoles el IBEX cerró su sesión con un avance del 1,77%, el tercer trimestre de 2015 ha sido el peor para la bolsa española desde 2011 con una caída del 11,23%. Solo en septiembre cayó un 6,81% lastrado por la desaceleración de China y la crisis de Volkswagen.

Coyuntura internacional
Aún con la aparente recuperación económica que quiere vender el Gobierno, lo cierto es que la situación de la economía internacional está lastrando a la española. Las bolsas occidentales también han experimentado una caída superior al 10% debido a la inseguridad que se ha apoderado de los mercados por el desplome de los mercados del gigante asiático, así como por la reducción de sus datos macroeconómicos y las medidas monetarias, fiscales y regulatorias que frente a ello está tomando el Gobierno de Pekín.

El desplome del petroleo, las materias primas y las divisas de otros países emergentes, así como la fluctuación de tipos de interés entre los que los mantienen, como EEUU, y los que los bajan, también se han debido a esta desaceleración china, cuyo crecimiento imparable ha sido el principal empuje de la economía mundial en los últimos años.

También la reciente crisis de la compañía alemana ha tenido una repercusión internacional que aún se está midiendo y que ha afectado principalmente al sector del automovil.