El nuevo presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado este lunes que los empresarios y empresas españolas instaladas en Cuba han "agradecido" el viaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la isla y ha pedido que los partidos se pongan "de acuerdo" en política exterior ante temas como el de Gibraltar. Así lo ha señalado en una entrevista en Antena 3, en el programa Espejo Público, en la que ha defendido la necesidad de que la oposición apoye al Gobierno en política exterior y ha pedido al Gobierno que "cuando se habla de temas exteriores cuente con la oposición".

'Tristeza' por el Bréxit

Tras las críticas de la oposición al acuerdo del Gobierno con la UE sobre Gibraltar en el marco de las negociaciones del Brexit, Garamendi ha señalado que "no puede ser que unos digan que todo está arreglado y otros que horriblemente mal", una diferencia de posturas que opina que guarda relación con la proximidad de las elecciones andaluzas el próximo 2 de diciembre.

Garamendi ha pedido que en política exterior los políticos se pongan "un poco de acuerdo" porque "la imagen que se da cada vez que hay política exterior no es muy buena". En cualquier caso, ha calificado de "noticia espantosa y muy mala" la salida del Reino Unido de la Unión Europea, y ha mostrado una tristeza "muy importante" de que un país tan importante y miembro fundador de la UE se segregue.

"Todo lo que pueda ser evitar el máximo dolor y consecuencias es bueno", ha enfatizado Garamendi, que sobre Gibraltar se ha limitado a recordar que en el Tratado de Utrecht venía establecido que "tenía que haber devolución a España", por lo que ha marcado la necesidad de encontrar una solución, ya que "todos" están a favor de que "las cosas se hagan de forma normalizada".

Recuperar las relaciones con Cuba

Respecto al viaje a Cuba del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a representantes empresariales -entre los que se encontraba él mismo-, Garamendi ha destacado que España es el primer país inversor europeo en la isla y el tercer país tras Canadá y China, y ha recordado que el expresidente de Francia, François Hollande, fue a Cuba "al día siguiente" de que Barack Obama "abriese la puerta" a la isla.

Además, ha subrayado que las empresas españolas llevan 30 años en Cuba, con un "montón" de compañías, y que el 90% de las plazas hoteleras allí son españolas. Por ello, ahora que "parece que el régimen cubano va a abrir, España tiene que estar presente", ha recalcado, para añadir que se han celebrado ya 23 cumbres empresariales y la última ha sido la primera con clase política". "Cuando los demás países estaban yendo con gobernantes nosotros estábamos solos", motivo por el que "los empresarios españoles instalados en Cuba y las empresas españolas que quieren y tienen empresas en Cuba han agradecido este viaje".

A este respecto, ha opinado que si las empresas españolas no pudiesen estar presentes en Cuba tal vez tampoco podrían estar en muchos países del mundo, ya que se ha preguntado qué democracias se asemejan a las europeas. "Nuestra obligación es estar en todos los lados, las empresas tienen que estar en todos los sitios y si los gobiernos nos apoyan, mucho mejor", ha zanjado.

Críticas al fin de los motores que emiten CO2

El recién elegido presidente de la patronal también ha calificado de "perverso" el anuncio del Gobierno de prohibir la venta de vehículos con emisiones directas de dióxido de carbono (CO2) en 2040 y ha añadido que "pone en peligro" la estabilidad de las empresas españolas. El presidente de los empresarios ha hecho un llamamiento al diálogo social ya que un anuncio así, sin pactarlo con el sector, "genera gran incertidumbre" entre los fabricantes, los trabajadores y los usuarios, y ha recordado que de este sector dependen más de tres millones de empleos en España. Unas críticas muy similares a las expresadas por los sindicatos, aunque el Gobierno ha dejado claras sus intenciones de llegar a acuerdos con todos los sectores afectados por la estrategia de descarbonización de España. 

"Cuando hay que plantear temas de sostenibildad tenemos que hacerlo juntos". Desde la CEOE, recuerdan que hay tres aspectos que se deben tener en cuenta en este tipo de decisiones: las personas, el medioambiente y la sostenibilidad económica. "Si se desestabiliza la economía, no se puede llevar a cabo", ha señalado Garamendi. Con respecto a las empresas, ha destacado que "son las primeras interesadas" en adaptarse tecnológicamente a los tiempos y que "lo harán".

En cuanto a las consecuencias que este anuncio tiene para las inversiones, ha recordado la reciente visita del presidente de Reanult -ahora encarcelado por presunto fraude fiscal-, Carlos Ghosn, a Valladolid, donde anunció una inversión de 600 millones de euros en los motores que el Gobierno quiere dejar de fabricar. "No puede ser que al día siguiente salga el Gobierno y diga que esos motores aquí no van a funcionar", ha señalado el presidente de la CEOE. Una de las razones en las que el Gobierno fundamenta esta decisión es que ocho de cada diez vehículos que se fabrican en España se destinan a la exportación. En este sentido, Garamendi señala que "es muy poco vendible decir que la prohibición aquí no va a afectar por esa razón".

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, considera que esta medida es una forma de acercar España a países como Alemania o Francia, que ya han tomado medidas similares. Sin embargo, desde la CEOE explican que "nosotros no somos Alemania. Ellos son los gestores pero nosotros los fabricantes y cada uno tiene que saber dónde está y cuál es su papel". En este sentido, Garamendi ha añadido que las inversiones que se están realizando hoy para la fabricación de motores de combustión en España no se van a amortizar si esta prohibición se materializa.

Una patronal "más moderna"

El nuevo presidente de CEOE ha asegurado que desde la patronal estarán al lado del Gobierno de España "siempre, con independencia, lealtad institucional y sentido de Estado", ya que, además, es su "obligación" como líder de la CEOE.

Igualmente, ha avanzado que, sin descartar un cambio de nombre de la patronal, trabajará para que ésta sea más moderna y paritaria, para lo que incluirá al menos cinco mujeres en el comité ejecutivo y ampliará las vicepresidencias para conseguir una mayor presencia femenina.