El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado este martes sus estimaciones macroeconómicas a nivel mundial, así como a nivel nacional. En el caso de España, ha empeorado de forma significativa las previsiones como resultado del impacto del coronavirus, de forma que espera que cierre el año con una tasa de paro del 20,8% y una caída del producto interior bruto (PIB) del 8%.

Se trata de los peores datos macro registrados por España en muchos años. De confirmarse la contracción del 8% de la economía, sería el peor dato registrado en toda la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística, desde 1970, y probablemente la mayor contracción experimentada en el país desde la Guerra Civil.

En el informe de primavera del FMI Perspectiva Económica Mundial, el organismo ha revisado en 9,6 puntos porcentuales a la baja la previsión del PIB para España para 2020. En 2021, el crecimiento será del 4,1%, lo que supone una corrección al alza de 2,7 puntos con respecto a las estimaciones de enero, siempre que los contagios se replieguen en el segundo semestre de este año y las medidas económicas logren la eficacia adecuada, según ha explicado la economista jefa del FMI, Gita Gopinath

La peor recesión desde la Gran Depresión

"Es una crisis como ninguna otra", ha asegurado Gopinath, quien ha alertado de que, a la magnitud del shock, hay que sumar la incertidumbre sobre su duración o intensidad. "Es muy probable que la economía global experimente su peor recesión desde la Gran Depresión, sobrepasando la vista durante la crisis financiera global de hace una década. Se prevé que la Gran Reclusión, como se podría llamar, disminuirá el crecimiento global de forma dramática", ha agregado.

La contracción de España entre los países será la segunda mayor entre las economías europeas, solo por detrás de Italia (-9,1%). Por su parte, Francia y Alemania experimentarán un descenso del 7,2% y del 7% respectivamente.

En el conjunto de la zona euro, el PIB caerá un 7,5% y repuntará un 4,7% en 2021. Por países, el mayor hundimiento será en Grecia, cuyo PIB se contraerá un 10%. Por detrás se situarán Italia, Letonia (-8,6%) y Lituania (-8,1%) y en quinta posición estarán tanto España como Eslovenia, con un -8%.

A nivel mundial, Gopinath ha explicado que el crecimiento caerá hasta el -3%, "una revisión muy importante en un periodo muy corto". Esto sucede porque "muchos países se enfrentan a crisis múltiples: sanitaria, financiera y el derrumbe de materias primas", en palabras de la responsable de Estudios de la FMI. 

Desempleo e inflación

El desequilibrio económico de España como consecuencia de la pandemia del coronavirus también se extenderá a otras variables, como la tasa de desempleo o la inflación. En lo que respecta al mercado laboral, España registrará una de las peores correcciones de su entorno ya que, mientras que 2019 cerró una tasa de desempleo del 14,1%, en 2020 llegará a ser del 20,8%. En 2021 mejorará la situación, pero aún así se mantendrá en el 17,5%.

En Italia, el paro crecerá del 10% en 2019, al 12,7% en 2020 y en 2021 caerá hasta el 10,5%. En Francia el paro alcanzará el 10,4%, casi dos puntos más que el año pasado, y en Alemania apenas se elevará en siete décimas, hasta el 3,9%. La cifra más elevada de la eurozona seguirá siendo la de Grecia, cuyo paro pasará del 17,3% al 22,3%, mientras que el mayor alza en puntos porcentuales será la de Portugal, cuya tasa escalará desde el 6,5% hasta el 13,9%.

En lo que respecta a los precios, el FMI ha revisado los pronósticos de España y espera que registre una deflación del -0,3% en 2020, mientras que en 2021 volverá a una inflación del 0,7%. En el conjunto de la eurozona, los precios se elevarán en dos décimas este año y en un punto porcentual en 2021. Italia registrará un alza de precios del 0,2%, mientras que Francia y Alemania cerrarán este año con una inflación de tres décimas cada uno.

Solidaridad para hacer frente al coronavirus

En su intervención, la economista jefa del FMI, Gita Gopinath, ha alertado que "el mundo ha cambiado radicalmente" y que son necesarias medidas políticas excepcionales, entre las que se encuentran garantías de crédito o liquidez, que deberán continuar durante la fase de contención. 

"La cooperación multilateral es vital", ha asegurado Gopinath. En concreto, ha recordado la importancia de proporcionar financiación concesionaria, donaciones y alivio de la deuda, así como ayuda mutua entre los principales bancos y organismos. 

Asimismo, alerta de que la "incertidumbre de lo que vendrá después es enorme" y para ello es necesario establecer políticas contundentes, desplegadas con rapidez y equilibradas sin demora, afirmando que la actuación ejemplar y conjunta en los hospitales debe inspirar a las autoridades económicas. 

En esta línea, asegura: “Es falsa la disruptiva de salvar vidas o preservar los sistema de vida. Es necesario un esfuerzo mundial para garantizar que tanto países ricos como pobres tengan acceso a vacunas y terapias que se desarrollen”.