Telefónica ha ratificado este mismo miércoles el nombramiento de Carlos Ocaña como consejero y representante de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en el máximo órgano de control de la teleco liderada por José María Álvarez-Pallete. Tal y como ha confirmado la SEPI a primera hora de la mañana a través de una información relevante remitida a la CNMV, el organismo inversor dependiente de Hacienda y del Gobierno ya ha superado el umbral del 7% del capital social de la compañía, inmerso en su camino para hacerse con hasta el 10% de la teleco española. Es por ello por lo que ya ha conseguido el porcentaje suficiente para contar con un asiento que represente los intereses accionariales del inversor público en la compañía. 

Carlos Ocaña Orbis ha sido ratificado esta misma mañana, apenas horas después de conocerse su elección como representante de la SEPI, en sustitución de la consejera Carmen García de Andrés en el órgano de control de la compañía. Tanto la SEPI como Telefónica han comunicado los correspondientes cambios a la CNMV este miércoles. La cotizada ha comunicado al regulador bursátil nacional que su consejo de administración ha dado el visto bueno a los cambios en la composición este miércoles en una reunión de forma unánime. 

El consejo de Telefónica ha aceptado la renuncia voluntaria presentada por Carmen García de Andrés a su cargo de consejera, una renuncia que ha explicado por motivos personales y "con el fin de contribuir al proceso de la renovación ordenada del Consejo de Administración de Telefónica", tal y como reza el comunicado remitido al regulador. Así, el consejo ha agradecido a la consejera los servicios prestados a Telefónica durante su mandato y ha pasado a nombrar sucesor de su asiento en el consejo a Ocaña, que entra en el órgano de control de Telefónica en nombre de la SEPI. 

Carmen García de Andrés deja también de ser miembro de las Comisiones del Consejo de Administración de las que formaba parte en la compañía, en concreto de la Comisión de Auditoría y Control y de la Comisión de Sostenibilidad y Regulación. Previo informe de la Comisión de Nombramientos, Retribuciones y Buen Gobierno, el Consejo de Administración de Telefónica ha nombrado a Carlos Ocaña Orbis consejero dominical de la teleco por procedimiento de cooptación. Así, desde este mismo miércoles, el consejero representará los intereses de la SEPI en una cotizada española clave para la sociedad y "estratégica" para el Gobierno. 

Si algo ha dejado claro el Gobierno en los últimos meses, desde el estallido del culebrón Telefónica, es el carácter estratégico de la compañía -además de histórico- y su intención de mantener la españolidad y la autonomía estratégica de la empresa y el sector tanto en presente como en futuro. La SEPI se comprometió hace meses, por orden del Consejo de Ministros, a mantener la españolidad de Telefónica a través de la compra de hasta un 10% de participación. Todo ello para contrarrestar la entrada sorpresa de capital saudí en la compañía, a través de Saudi Telecom Company (STC), con el plan de hacerse con el 9,9% de Telefónica aparentemente en stand-by. Por el momento, STC tiene un 4,9% de Telefónica, un porcentaje que ya supera CriteriaCaixa y la SEPI en base a los últimos movimientos en el accionariado.

La SEPI, dependiente de Hacienda, superó el 7% del capital de Telefónica a fecha 3 de mayo, la semana pasada, por lo que le da derecho ya a solicitar este asiento en el consejo de administración que, a día de hoy, está liderado por Pallete. Por otro lado, Ocaña también ha sido nombrado, previo informe de la Comisión de Nombramientos, Retribuciones y Buen Gobierno, vocal de la Comisión Delegada y de la Comisión de Auditoría y Control dentro del consejo de administración de Telefónica. 

El organismo inversor dependiente de la cartera de Hacienda también ha trasladado la nueva compra de acciones, hasta superar ese 7%, y el nombramiento de Carlos Ocaña como representante de sus intereses en el accionariado de Telefónica a la SEC, el regulador búrsatil de Estados Unidos, en cumplimiento de la normativa vigente en dicho país. Una información que, como indica en el comunicado remitido a la CNMV española, se comunica "de forma voluntaria", en aras de evitar la asimetría en la información a difundir respecto de Telefónica de acuerdo con la normativa aplicable en otras jurisdicciones y la que resulta de la normativa española.