Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, se han pronunciado sobre los despidos en el sector bancario conocidos esta semana. Precisamente este jueves BBVA ha planteado un plan de ajuste con el despido de 3.798 personas y el cierre de 530 oficinas.
“Me parece que toda esta sarta de Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que aparecen en el sistema financiero de nuestro país son una prueba evidente de la insensibilidad, de la falta de responder al interés general que tiene el sistema financiero español”, denuncia el líder de UGT.
“Lo es frente a sus empleados; frente a los ciudadanos, que hace muy poco tiempo endeudamos al conjunto del país, y por tanto nos endeudamos todos, para que hoy el sector financiero pueda estar vivo en nuestro país. Y lo es desde el punto de vista de los usuarios que verán mermadas sus posibilidades de poder ser atendidos de manera directa en muchos lugares de nuestro país, contribuyendo de manera absolutamente decisiva a continuar vaciando nuestro país”.
Pepe Álvarez ha denunciado también el ERE anunciado por CaixaBank el pasado martes, que afectará a 8.291 trabajadores y tendrá como consecuencia el cierre de 1.534 oficinas en el territorio nacional, en el que destaca además dos problemas “todavía más graves”.
“Me parece que concurren todas estas cuestiones de gravedad a las que he hecho referencia, pero además hay dos que me parecen todavía más graves. Una, que mientras tanto, los directivos estén ofreciendo bonus justamente para despedir a más gente, como si una entidad financiera que tanto soporte público ha recibido en la confluencia de todas las cajas que hoy componen CaixaBank no tuviera que pensar en el interés general”, denuncia Álvarez.
Piden al Gobierno impedir que se cometa "un atraco"
El secretario general de UGT ha hecho un llamamiento a las autoridades y a los propietarios del 16% de CaixaBank para que “no solo expresen públicamente, como ha hecho la vicepresidenta segunda del Gobierno, su malestar por esta situación, sino que a través de su participación impidan que se cometa un atraco de las características que representa el ERE que hemos conocido de CaixaBank”.
En la misma línea se ha pronunciado el secretario general de CCOO, Unai Sordo: “Las medidas de despidos que están planteando las entidades financieras son un escándalo y una obscenidad, después de que los recursos públicos hayan rescatado al sistema financiero español en la anterior crisis; que el país esté endeudado, entre otras cosas, por ese rescate al sistema financiero y después de que las políticas de austeridad que se le impusieron a España fueron a cambio del rescate a la banca”.
“Es una vergüenza lo que está ocurriendo y va a contar con el rechazo sindical. Sabemos que el sistema financiero está en un momento complicado en el que se está reestructurando, pero la salida de esta reestructuración no pueden ser despidos en estos términos. En el caso de BBVA además con una política sorpresiva y que no se corresponde a lo que se le estaba anunciando a la plantilla”, matiza Sordo.
El líder de CCOO se suma a la petición de Álvarez y reclama: “Instamos al Gobierno a que presione, a que haga valer las instituciones y los espacios de influencia que tiene”.
Además, ha puesto sobre la mesa otro problema derivado de la reestructuración, más allá de los despidos: la exclusión financiera. “Pretenden hacer desaparecer 530 oficinas de BBVA, someten a un nivel de exclusión financiera a una parte de este país que es absolutamente intolerable. Exigimos corresponsabilidad al sector financiero, que ha sido salvado por España, por su ciudadanía y que no está teniendo una actitud corresponsable a la hora de abordar su proceso de modernización”.
