El ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, ha anunciado este lunes un acuerdo con los grandes grupos de distribución alimentaria nacionales para abaratar el precio de los productos básicos de la cesta de la compra, una alternativa que en Francia han bautizado como una "cesta antiinflación”. Una medida que se parece, en cierta forma, al tope al precio de los productos básicos que lleva proponiendo, desde hace meses, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, pero que ni siquiera se ha llegado a plantear en las negociaciones del Gobierno con las grandes patronales de la distribución, tal y como ha podido saber ElPlural.com según fuentes de ANGED. Más allá de las diferentes medidas que hay sobre la mesa para abaratar la cesta de la compra, hay una pregunta más que clara en la sociedad: ¿por qué Carrefour va a bajar los precios de sus productos en Francia pero no en España?

ElPlural.com ha trasladado esta pregunta directamente a la cadena de supermercados, sin obtener respuesta por el momento, ni tampoco a si la cadena tiene previsto ampliar los descuentos por debajo de los Pirineos. La primera respuesta que se le puede venir a la cabeza a los consumidores es que Francia obligará a las cadenas de supermercados a bajar sus precios, pero nada más lejos de la realidad. Y es que el acuerdo al que ha llegado el Gobierno francés con las diferentes empresas les deja libertad absoluta para decidir qué productos entrar en la "cesta antiinflación" y hasta qué precio lo bajan. 

Sin embargo, hay una razón que explicaría por qué Carrefour y otras grandes cadenas de distribución alimentaria francesas como E.Leclerc -que tampoco ha respondido a las preguntas de ElPlural.com- no tienen que replicar los descuentos en sus productos básicos en los supermercados españoles. El pacto en Francia se ha alcanzado directamente entre el Gobierno y las empresas de distribución individuales, que en los próximos días podrán decidir con total libertad su lista de productos básicos, así como el precio de estos, pero sin contar con las patronales del sector, según han explicado fuentes de ANGED a ElPlural.com, lo que podría tener un impacto negativo en la libre competencia del sector. 

En España se negocia de forma colectiva 

Al contrario de lo que ocurre en el país vecino, los principales actores del sector de la distribución en España negocian a través de las patronales de distribución, una táctica más cercana al diálogo social. La mesa de diálogo para definir las medidas más acertadas que consigan frenar el encarecimiento de los productos básicos de la cesta de la compra en los supermercados españoles cuenta entonces con dos partes claves. En un lado está sentado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, con Luis Planas a la cabeza, siendo el máximo responsable del Gobierno en materia de alimentación. En el otro lado de la mesa se sientan los líderes de las tres grandes patronales que actúan como representación de las cadenas de supermercados que operan en España.

La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS) y la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES) son quienes negocian, de forma general y colectiva, con los representantes de la cartera de Agricultura, Pesca y Alimentación. Un diálogo entre ambas partes que busca encontrar la mejor alternativa para abaratar la cesta de la compra de los españoles, pero sin perjudicar a la competencia entre las diferentes cadenas de supermercados.

Y es que ANGED representa, por ejemplo, a la propia Carrefour en España, pero también a otras grandes cadenas de supermercados como Alcampo, Eroski o El Corte Inglés. Por su parte, ASEDAS representa a supermercados tan populares como Mercadona, DIA, Lidl, Gadis, Lupa, AhorraMas, Spar o Alimerka. También ACES tiene entre sus representados a la propia Carrefour, Alcampo, Eroski o Supercor. Las tres patronales negocian de forma conjunta para sus representadas y no de forma individual, como ha ocurrido en las últimas conversaciones entre el Ejecutivo francés y las cadenas de supermercados para alcanzar este pacto. 

El tope al precio de los productos básicos no se ha propuesto en la negociación

A pesar del ruido y del debate de los últimos meses para descubrir cuál es la mejor medida que logre abaratar el precio de los alimentos básicos de la cesta de la compra, la última reunión mantenida entre Planas y las tres grandes patronales de los supermercados terminó con buen tono entre ambos, aunque sin un acuerdo claro. Desde ANGED explican que este último encuentro estuvo protagonizado por la creación del Observatorio de la Cadena Alimentaria por parte del Gobierno, con el objetivo de frenar el aumento de los costes en la cadena de distribución. Asimismo, la patronal asegura que en estas reuniones ni siquiera se ha planteado la propuesta de topar los precios de los productos básicos de la cesta de la compra, la petición estrella de Díaz de los últimos meses.

El pacto entre el Ejecutivo francés y los supermercados permite ahora que las diferentes cadenas, a nivel individual, puedan decidir con total libertad y autonomía cuáles son los productos que incluyen en su cesta de la compra básica. Supermercados como Carrefour se han comprometido a reducir hasta “el precio más bajo posible” estos productos, pero sin un tope marcado realmente por el Gobierno.

Es decir, los supermercados franceses siguen teniendo libertad para fijar sus precios y serán ellos, de forma individual, quienes decidan en qué medida ayudar a los consumidores a abaratar su compra semanal. El propio ministro de Economía ha justificado que Francia es "una nación que cree en la libertad de comercio", reiterando que no le corresponde al Gobierno intervenir el mercado de la distribución alimentaria. Con esto, los productos incluidos en la cesta simplemente llevarán los colores de la bandera francesa y el lema “trimestre antiinflación”. Y sí, la medida durará inicialmente un trimestre, con la intención del ministro de Economía francés de reabrir la negociación en junio.

La lista de productos básicos que lanzó Carrefour en España: chocolate blanco y limpiacristales

Carrefour ha sido una de las primeras en anunciar sus descuentos tras el pacto alcanzado con el Gobierno francés este lunes y ha asegurado que el próximo 15 de marzo lanzará una cesta de la compra con 200 productos, con importes congelados en los “productos saludables y frescos” de sus marcas propias, Carrefour y Simply, por debajo de los 2 euros. "Hacemos lo posible para que la inflación no sea sinónimo de regresión en la calidad de la alimentación", ha explicado el presidente del grupo, Alexandre Bompard, en una entrevista al periódico francés Le Journal du Dimanche.

En este punto hay que recordar la propuesta de cesta de la compra básica que lanzó Carrefour en septiembre de 2022 en España, tras los primeros movimientos de Díaz para topar los precios. Una lista de 30 productos a 30 euros abierta -realmente eran productos que se comercializaban a 1 euro en sus estantes- que incluía productos tan variopintos como té de limón de su marca, una tableta de chocolate blanco, un tarro de pimientos del piquillo, gel de ducha, detergente a mano o limpiacristales. Una lista que no tardó en despertar las críticas de los consumidores ya que no contaba con productos frescos como fruta, verdura, carne o pescado y ni siquiera con los productos habituales de una compra semanal como aceite de oliva (aunque sí de girasol), leche o pasta. ElPlural.com también ha consultado a Carrefour por dicha iniciativa y sobre el impacto que tuvo en su negocio, sin ofrecer respuesta por el momento. 

Planas celebra la "cesta antiinflación" de Francia pero defiende la no intervención del Gobierno

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha valorado positivamente la medida francesa tras conocer el acuerdo. “El Gobierno francés ha presentado un paquete antiinflación para este trimestre, en el que se incluyen algunas medidas de apoyo a la población más vulnerable", reconocía el responsable de la cartera este mismo lunes. Planas incluso se abría a la creación de esta cesta antiinflación en los supermercados españoles, pero que no es un tope real a los precios de los productos básicos. "Las empresas pueden plantear iniciativas similares en nuestro país que lleve a una contención de los precios, pero siempre con respeto a la Ley de la Cadena Alimentaria y que no sea en perjuicio de la industria ni de los productores", matizaba después el ministro.

"Esperamos que dentro del campo de la libre competencia, las empresas de la distribución puedan también en este sentido plantear iniciativas similares en nuestro país que no sea en perjuicio de la industria ni sobre todo de los productores primarios", defendía Planas, pasando la pelota directamente a los supermercados y dejando claro la no intervención del Gobierno en la libertad de comercio. 

También la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha celebrado la medida aprobada en Francia, recordando que ella ya ha defendido que “es posible” y “completamente legal” en los últimos meses. "No solo es posible. Ya demostré que es completamente legal. Es posible ofertar una cesta de productos, yo dije 20, pero los que sean, por un precio limitado. Artículo 13 de la ley del comercio minorista", anunciaba públicamente tras conocer la iniciativa francesa. Por su parte, las grandes patronales de la distribución alimentaria en España no se han pronunciado sobre la iniciativa por no contar con la propuesta, pero también por el hecho de no haber tenido en cuenta a su homólogo francés en la negociación.

Diferencias entre España y Francia: más transparencia en la cadena

Otra de las grandes diferencias entre España y Francia es que, en el país vecino, los supermercados tienen la obligación de publicar los márgenes de beneficios que obtienen en cada paso de las cadenas de distribución. En otras palabras, el Ejecutivo francés tiene conocimiento de la diferencia entre lo que pagan las cadenas de distribución a los agricultores y lo que cobran después, por esos mismos productos, a los consumidores en sus supermercados. El Gobierno francés ha anunciado tras el acuerdo que publicará estas cifras de forma mensual para dejar claro a los consumidores finales quiénes se están haciendo ricos subiendo los precios en los pasos de la cadena y quiénes no.

En nuestro caso, solo el Ministerio de Hacienda cuenta con estos datos y se publican de forma trimestral en el Banco de España pero como sector, no por cifras individualizadas, lo que no sirve a los consumidores para saber qué supermercado actúa de forma más, o menos, correcta en los pasos ocultos de la cadena de distribución.

Mientras tanto, el Gobierno ha puesto en marcha ya varias medidas para abaratar la cesta de la compra de los españoles. En primer lugar, el último Consejo de Ministros del año aprobó el tercer Real Decreto anticrisis, por el que el Ejecutivo eliminaba el IVA a los productos básicos como leche, pan, fruta o huevos, pasando del 4% al 0%, y reducía el de la pasta y el aceite del 10% al 5%. En este mismo Real Decreto anticrisis el Gobierno anunciaba el cheque de la compra por valor de 200 euros para las rentas anuales inferiores a los 27.000 euros, que se puede solicitar desde el pasado 15 de febrero y hasta el próximo 31 de marzo, como medida adicional para frenar el impacto de la inflación y del consiguiente aumento de los precios de los productos básicos de consumo.