El anuncio de la SEPI para entrar en el capital de Teléfonica con una participación de, como máximo, el 10% es, hasta ahora, el último capítulo de la historia que arrancó el pasado 5 de septiembre con la irrupción sorpresa del fondo soberano saudí, Saudi Telecom Company (STC), en el accionariado del gigante de las telecomunicaciones nacionales. La compra de hasta un 10% del capital de Telefónica, frente a la intención de hacerlo en un 5% que comunicaba el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda hace un mes, ha provocado todo tipo de reacciones, entre ellas una evolución positiva en los mercados. 

Telefónica ha cerrado su última sesión con una subida del 3,2%, en los 3,67 euros por acción, después de despegar incluso un 7% en los primeros segundos de apertura del Ibex 35. La teleco lideró las subidas de la bolsa española durante toda la jornada bursátil en la sesión inmediatamente posterior a conocerse el anuncio oficial de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para entrar en el capital de la compañía liderada por José María Álvarez-Pallete. Todo ello con el objetivo de convertirse en accionista mayoritario de referencia en la compañía española, "estratégica" para los intereses nacionales y clave para la defensa y la ciberseguridad a todos los niveles. Las acciones de Telefónica moderan su evolución en la sesión de este jueves y registran ligeras caídas del 0,50%, todavía por encima de los niveles previos a conocerse la intención de la SEPI. 

No solo la evolución de la acción de Telefónica en los mercados bursátiles ha dejado constancia de la opinión positiva que despierta la entrada de la SEPI en el accionariado de la teleco. También otros de los grandes accionistas presentes, a día de hoy, en el capital de Telefónica celebran la medida del Gobierno, como ha podido saber ElPlural.com, tanto por la protección de una compañía clave para la sociedad, que cumple sus 100 años de historia a partir de este mismo 1 de enero de 2024, como por el "apetito inversor" que demuestra la apuesta por entrar en su accionariado con hasta un 10%, dejándole por encima de los grandes bancos presentes en el capital de Telefónica, BBVA y LaCaixa, con una participación repartida entre CaixaBank y CriteriaCaixa, ambos alrededor del 5%.

El Gobierno justifica la entrada en Telefónica por su carácter "estratégico" 

El Ministerio de Hacienda y Función Pública, como responsable último de la SEPI, justifica la entrada del Gobierno en el capital de Telefónica casi 27 años después de su privatización como una medida para asegurar la "autonomía estratégica" de la compañía, el argumentario que se ha mantenido de forma oficial desde el primer conocimiento de la apuesta de STC por el capital de Telefónica. Lo que sí sorprende, no obstante, es la cifra con la que el Gobierno quiere entrar en el accionariado de la teleco.

Hace apenas unas semanas, la SEPI comunicaba oficialmente a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su intención de hacerse con un 5% de Telefónica, un porcentaje que ahora ha decidido duplicar, sin conocerse aún el motivo de esta cambio, más allá de la intención que reconoce públicamente de convertirse en accionista de referencia de la teleco. Todo ello para asegurar su autonomía estratégica y acercar a Telefónica a la realidad actual del sector de las telecomunicaciones europeas

La cartera de María Jesús Montero defiende en el comunicado remitido tras recibir el visto bueno del resto de ministros, en el penúltimo Consejo de Ministros del año, para la entrada de la SEPI en Telefónica que responde a la tendencia actual en el resto del continente europeo. Es el caso del Gobierno de Alemania, que cuenta con un 13,8% del capital de su gigante de las telecomunicaciones, Deutsche Telekom; de Francia, que también controla un 13,4% de Orange -en plena operación de fusión en España con el negocio de MásMóvil-, o del Gobierno italiano de Giorgia Meloni, con un color político muy diferente al del Gobierno de coalición actual de PSOE y Sumar, que ha ratificado un acuerdo para hacerse con hasta el 20% de la participación en la teleco italiana que agrupa los activos de telefonía fija, Telecom Italia.

STC opta por guardar silencio

El anuncio de la SEPI, como representante de la inversión pública del Gobierno, para convertirse en accionista de referencia de Telefónica ha sorprendido a muchos, tanto por la cifra -que duplica ese 5% anunciado hace menos de un mes- como por el marco temporal en el que se ha producido. Y es que, hasta ahora, aparentemente reinaba una situación de calma en el culebrón Telefónica tras la decisión de Saudi Telecom Company (STC) de aplazar, por el momento, su desembarco total en el accionariado de Telefónica. La teleco saudí ha pausado su estrategia, como un capítulo más de la historia que comenzó hace ya más de tres meses, y parece que por el momento ha optado por quedarse con el 4,9% de Telefónica que ha conseguido con su primer movimiento. 

La intención incial de la teleco saudí, controlada por el Gobierno de Arabia Saudí, era hacerse con un 9,9% de Telefónica, una posición que le dejaría como accionista de referencia en la teleco española. No obstante, para ello necesita del visto bueno del Gobierno, en concreto del Ministerio de Defensa, por tratarse de una participación superior al 5% en una empresa considerada estratégica para la defensa y la ciberseguridad nacional. La actualización del escudo antiopas aprobado en verano por el Gobierno indica que la compañía interesada, en este caso STC, debe solicitar formalmente la compra de más de un 5% de participación al Ministerio de Defensa, la cartera dependiente de Margarita Robles.

A finales de diciembre, y con la SEPI como protagonista del último capítulo, desde STC ni confirman ni desmienten haber solicitado esta participación al Gobierno. En otras palabras, desde la compañía de capital saudí no dan pistas sobre si se ha enviado o no el papel necesario para hacerse con el 9,9% de Telefónica, como tampoco se ha pronunciado el Ejecutivo sobre la posible recepción del papel en las últimas semanas. Las últimas informaciones conocidas por ElPlural.com sobre el envío o recepción de la autorización datan de finales de octubre, cuando el Gobierno todavía no había recibido dicha autorización por parte de STC para convertirse en accionista mayoritario de Telefónica. Ahora, lo pida o no, el accionista de referencia será el Estado si finalmente ejecuta la compra del 10% del capital de la teleco, el porcentaje máximo aprobado por el Consejo de Ministros, por encima de STC, los grandes bancos o los fondos de inversión como BlackRock.