El barril de brent cotiza a menos de 98 dólares y lleva por debajo de los cien dólares tres meses (desde mediados de junio). Era casi impensable hace no mucho y hubiera sido una noticia de portada de todos los medios en los años 70 y en los años 80, cuando la crisis del petróleo puso en jaque el crecimiento económico de Occidente (Europa y Estados Unidos). Por aquel entonces el precio del barril de brent, el de referencia en la mayor parte del mundo menos en estados Unidos que es el barril Texas, tenía sección fija en todos los informativos del mundo, de la misma manera que en los últimos años la ha tenido la famosa 'prima de riesgo'. Sin embargo la actual crisis, mucho más compleja que la de los 80 del siglo XX y la peor desde la Segunda Guerra Mundial, ha relegado el barril de petróleo a unas líneas en las secciones de economía.

Bajada de un 14%
El barril de Brent cotiza actualmente entre los 97 y 98 dólares, lo que por cierto rompe otro de los vaticinios de los economistas durante décadas, el que decía que sobrepasaría los 200 dólares debido al agotamiento de reservas y al proceso de industrialización mundial, con el consumo disparado por el crecimiento de los países emergentes y especialmente de China. Este precio tan llamativamente bajo obedece a dos causas, el estancamiento de la economía europea además del estancamiento o recesión de los emergentes (a excepción de China) y al impacto de otras energías como las renovables. Dentro de esta segunda causa hay un dato fundamental: Estados Unidos no solo es autosuficiente, sino que gracias al 'fracking' (extracción de gas por fracturación hidráulica) está a punto de convertirse en exportador. Precisamente el temor de las potencias occidentales a ser rehenes de los países productores de petróleo llevó a las economías más desarrolladas a apostar por otras formas de energía como las renovables. En España se hizo en las dos legislaturas de Zapatero, hasta que Rajoy y la crisis dieron un mazazo al sector.

La gasolina prácticamente igual y el diésel sube
De nuevo la espectacular bajada del barril de petróleo no se traduce en lo que pagan los ciudadanos, el litro de gasolina de 95 tan solo ha bajado un 1,16%, pero lo que es más llamativo, el litro de diésel ha subido un 0,9%. Mientras las asociaciones de consumidores denuncian que las subidas del barril se repercuten inmediatamente en el bolsillo de los ciudadanos y las bajadas no se aplican, la petroleras se defienden explicando que no se puede compara las oscilaciones entre el precio del barril y el de las gasolineras porque no se tiene en cuenta el impacto de los impuestos. Sin embargo la Comisión Nacional de Mercado y Competencia ha reconocido en más de un informe que en España los carburantes son demasiado caros por falta de competencia en el sector.