Hace meses que economistas de todo signo advierten de que una súbita reducción del gasto público en plena parálisis económica agudizará los problemas sin políticas compensatorias, pero el PP en la oposición inistía en que la varita mágica de la recuperación eran los recortes y una profunda reforma laboral. Uno de los principales promotores de ese discurso ha sido Luis de Guindos, que hace dos años coordinó para FAES el libro España, claves de prosperidad en el que se reivindicaba la política económica de Aznar para insistir en que el PP sacaría al país de crisis.

Tras las pésimas perspectivas...
Como única crítica a los mandatos de Aznar, De Guindos advertía en la presentación del volumen de que no se había acometido con decisión la reforma laboral. Ahora el PP se ha lanzado a enmendar ese error. Pero nada más retomar el poder, los populares se han puesto a recortar gasto y las perspectivas económicas no solo no mejoran sino que empeoran notablemente. El FMI advierte de que en 2012 la economía española caerá un 1,7% e incumplirá sus compromisos de déficit este año y el siguiente, mientras que el Banco de España prevé que la tasa de paro se sitúe por encima del 23% con la destrucción de cerca de 500.000 empleos.

... apela a la sensibilidad europea para recuperar el crecimiento
Tras estas malas perspectivas, De Guindos dejaba entrever en una entrevista en Los Desayunos de TVE que algo falla en su ecuación. Insistía eso sí en que su ansiada reforma laboral es "la clave" para que se vuelva a confiar en España, poniendo a los convenios colectivos en el punto de mira. Pero también abría la puerta a flexibilizar los objetivos de déficit al anunciar que una vez se conozcan las proyecciones de crecimiento económico de la UE, negociarán de nuevo con Bruselas "el programa de estabilidad" español. Y sobre todo, admitía las limitaciones de las bondades de los recortes y señalaba a Europa en busca de complicidad. Según De Guindos en Europa se está variando "un poco" el rumbo ya que después de años enfocados sólo a la austeridad "los líderes son sensibles a volver a hablar de crecimiento" para salir del estancamiento. El ministro de Exteriores también miró ayer a Alemania en busca de ayuda e instando a Merkel a actuar diciendo que la canciller germana "reacciona siempre un cuarto de hora más tarde de lo que hay que reaccionar".

Sobre su paso por Lehman
En su entrevista en TVE, De Guindos se enfrentó al trance de ser cuestionado por cómo alguien que estuvo en Lehman Brothers, el banco quebrado en el origen de la actual crisis, puede asumir las riendas económicas de un país. El ministro diferenció la división española que él dirigía de los problemas de la entidad a nivel global y aseguró que "si tuviera la más mínima duda de haber contribuido a la crisis mundial, no estaría donde estoy". Para él, la diferencia entre Lehman Brothers y otros bancos es que su entidad no fue rescatada.