Con un café cerca del Congreso, así han cerrado el ministro de Economía, Luis de Guindos, y el economista de Ciudadanos, Luis Garicano, el acuerdo para que el partido naranja apoye los Presupuestos Generales del Estado para 2017 que este viernes ha presentado el Ejecutivo.

Una vez más, Albert Rivera vuelve a pactar con Rajoy, pero esta vez parece que tiene mejor agarrados los compromisos, le ha arrancado 4.100 millones de euros en partidas sociales, así como recortes de impuestos en cultura y no subirlos en bebidas azucaradas y carburantes.

Rivera, pletórico

Ciudadanos también ha ganado llevarse la primicia de los presupuestos, así como el protagonismo por haber acabado con las cuentas de los recortes que en los años anteriores había presentado el Ejecutivo de Mariano Rajoy.

Rivera incluso ha asegurado que el acuerdo es “incluso mejor” de lo que esperaba y se ha mostrado convencido de que permitirá cumplir con el déficit del 3,1 por ciento.

Dinero a educación y sanidad

“Estoy muy satisfecho y agradezco que el Gobierno haya cumplido el acuerdo que firmamos” e, incluso, mejorado, ya que, según ha señalado, se pactaron en la investidura partidas por un importe de 3.800 millones de euros y, finalmente, sumarán 4.100 millones.

Desde el equipo económico de Ciudadanos se han esforzado en vender que en las nuevas cuentas no habrá recortes en Educación o Sanidad, justificándolo en medidas como el aumento de un 14% en el gasto en la lucha contra la violencia machista, 10% más para la atención a la dependencia, 50 millones para libros de texto gratis y 30 millones en un plan contra el fracaso escolar.

En materia de empleo, los presupuestos incluyen 1.200 millones para políticas de formación y para un nuevo sistema de cheques de formación.

Sin subida de impuestos

Entre las “reformas naranjas”, como así han vendido los de Ciudadanos el acuerdo, también se encuentra no tocar ni el IVA ni el IRPF, así como no crear el nuevo impuesto a bebidas azucaradas o de hidrocarburos que el Gobierno ya anunció a principios de año. Ciudadanos asegura que finalmente no se van a llevar a cabo, dada la oposición mostrada por la mayoría de los grupos políticos en el Congreso y a la vista de la buena evolución de la recaudación.

La bajada afectará a los espectáculos como los conciertos, el teatro, la danza o los toros, pero no así al cine que, según explicaba recientemente el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, llegará cuando se cumpla “con la senda del déficit”, un horizonte que siempre ha esgrimido el Gobierno ante las demandas de rebaja fiscal.