La competencia por presidir el Banco Europeo de Inversión (BEI) sigue al rojo vivo y en las últimas horas las dos principales competidoras han seguido avanzando posiciones. La vicepresidenta y comisaria de Competencia de la Comisión Europea, Margrethe Vestager, ha renunciado temporalmente a sus funciones en Bruselas para centrarse en la carrera por el BEI. La candidata danesa ha solicitado una excedencia al Ejecutivo europeo y ha lanzado un órdago al resto de contendientes. Nadia Calviño, la otra favorita, no ha querido entrar al trapo y ha garantizado que mantendrá sus responsabilidades en el Gobierno español.

"Al menos hasta diciembre", ha dejado caer Calviño, su trabajo seguirá siendo el de vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital en funciones. La vicepresidencia es donde continúa poniendo el foco la candidata española, dejando a un lado su desempeño ministerial en lo que podría ser una declaración de intenciones a futuro. Está “centrada”, asegura, en un trabajo “absorbente” que no aclara si seguirá desempeñando de constituirse un nuevo Gobierno de Pedro Sánchez, pero también reconoce tener una “fuerte motivación” por presidir el BEI.

Las pretensiones de la líder económica española se centran en “reforzar aún más” una de las instituciones más importantes de Europa. Si bien es un momento complejo, llevar a cabo este refuerzo es una “tarea inspiradora” para Calviño. "El presidente Sánchez pensó que debíamos presentar una candidatura fuerte", ha explicado, destacando el papel del BEI como "el mayor banco público de desarrollo del mundo" con "un papel clave a desempeñar en el futuro". "Todos somos conscientes de la necesidad de movilizar recursos financieros y de que las instituciones fuertes de la UE deben reforzarse aún más", ha añadido.

Su máxima rival no está menos motivada, tal y como ha demostrado centrando todas sus fuerzas en la lucha. "A partir de hoy soy candidata oficial a presidir el Banco Europeo de Inversiones. Me tomo una excedencia de la Comisión Europea para centrarme en mi candidatura hasta que se decida el nombramiento", ha anunciado Vestager. La decisión de la candidata danesa ha obligado a Úrsula von der Leyen, presidenta de la Comisión, a buscar una persona que asumiese sus funciones y la ha encontrado en Didier Reynders.

La cartera de Competencia pasará a manos del que ya era comisario de Justicia y que “dependerá directamente de la presidenta", no de otra vicepresidencia. "Seguiré garantizando que la política y las normas de competencia de la UE se aplican de manera enérgica", ha apuntado Reynders. En el comunicado emitido, el también liberal  agradece la "confianza" depositada en él por Von der Leyen y desea "mucho éxito" a Vestager en su carreara por la presidencia del BEI. Los expedientes de Vestager relacionados con la transformación digital serán asumidos por Vera Jourova.

Otros competidores y fechas del calendario

La carrera por obtener apoyos será apretada y todos los calendarios señalan el 15 y 16 de septiembre como fechas claves para que se decante la balanza. En algo más de una semana, Santiago de Compostela acogerá encuentro informal entre los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE), de dónde pueden salir bloques más consolidados.

Calviño buscará el apoyo del eje francoalemán, siendo el punto clave la financiación de proyectos de energía nuclear, promesa que puede hacer virar a Francia en cualquier momento. La española ya ha dado un paso en este sentido y se ha limitado a señalar que, de hacerse con el cargo, se ceñirá a lo que "determinen los reglamentos comunitarios". Reglamento que, desde hace dos meses, contemplan la financiación a la energía nuclear y solo debería ser incorporado al BEI. Por su parte, Vestager cuenta con el apoyo de los liberales, que no cuentan con voto como grupo parlamentario, pero han instado a los Estados miembro a decantarse por la candidatura de la danesa.

Más allá de las principales favoritas, otros contendientes se mantienen a la espera, por si entre la división de bloques encuentran un hueco. Nombres como el de Mario Draghi, exministro de economía italiano, están muy presentes. Dos vicepresidentes del BEI, la polaca Teresa Czerwinska y el sueco Thomas Ostros, también se postulan para alcanzar la presidencia. La candidatura polaca se encuentra lastrada, principalmente, por el ataque contra el Estado de Derecho que el Ejecutivo de extrema derecha está desarrollando en el país. La sueca, por el contrario, desprende experiencia y está falta de innovación.