El Banco Central Europeo (BCE) no abandona su estrategia de subida desmedidas de los tipos de interés para combatir la elevada inflación que experimenta la zona euro. Tras la subida de 50 puntos básicos aprobada el pasado 15 de diciembre, que situó el índice en el 2,5%, ahora el organismo se prepara para realizar nuevos incrementos, en plural, en las próximas reuniones. Así lo ha confirmado Klaas Knot, gobernador del Banco de Países Bajos y miembro del Consejo de Gobierno del BCE. "No se detendrá después de un solo aumento de 50 puntos básicos, eso es seguro", ha asegurado en una entrevista concedida la cadena estadounidense CNBC.

La senda restrictiva con el crédito, que eleva el precio del dinero, continuará durante el año 2023 y se prevé que alcance el 3% antes de primavera, superándolo con subidas posteriores. "No puedo decir de antemano dónde va a terminar ese ritmo de alzas de 50 puntos básicos, pero está muy claro que nuestra presidenta ha usado el plural en sus palabras", ha añadido el consejero. Estas palabras confirman lo que, Christine Lagarde, presidenta del BCE, anticipó en diciembre, señalando que, en función de los datos disponibles, debería esperarse que la entidad suba los tipos "a un ritmo de 50 puntos básicos durante un período de tiempo".

Relacionado Consecuencias de las subidas de tipos de interés

Son ya cuatro las subidas consecutivas que ha acometido la entidad europea, aunque, en la anterior ocasión, el incremento fue menor en comparación con los 75 puntos de finales de octubre, política que parece que va a perdurar, estableciendo los 50 puntos básicos como valor habitual de las subidas. Sea cual sea la subida futura, perjudicará duramente al coste de las hipotecas, acrecentando el daño provocado por las anteriores.

Esto sucede porque el Euríbor, principal índice al que están ligadas las hipotecas de tipo variable, tiene condicionado su valor al precio del dinero, es decir, a los tipos de interés. El valor a doce meses de este indicador cerró el año con una media del 3,02%, valor no alcanzado desde 2008, en plena crisis inmobiliaria. La subida de tipos despuntará más el valor, que se sitúa ya por encima del 3,3% en lo que llevamos de enero. Esta presión del coste de los préstamos hipotecarios es una variable que asfixia a las familias con más dificultades económicas, situación que parece no tener mucho peso para los mandatarios encargados de tomar estas decisiones.

Relacionado ¿Cómo afecta a tu hipoteca la subida de tipos del BCE?

De hecho, el alza total en las hipotecas variables supera ya, teniendo en cuenta la anterior subida, los 250 euros mensuales y se prevé crezca aún más, una muy mala noticia para las familias que tenga que renovar sus hipotecas variables en los próximos meses o aquellas que quieran suscribir nuevas hipotecas, caso en el que las fijas también se verán afectadas al estar su valor siempre por encima del variable. 

Tanto es así que, en el caso de una hipoteca variable a 25 años de 150.000 euros y con un diferencial del 0,99% más Euríbor sufrirá con la actualización un aumento de su cuota hipotecaria de alrededor de 260 euros, es decir, pasando de pagar 448 euros al mes a abonar 708 euros a partir de la revisión, lo que equivale a un incremento de 3.150 euros anuales. Sobra decir que esto, sumado al elevado precio de los alimentos, es inasumible para las familias trabajadoras, empujadas a elegir, en muchos casos, entre pagar la hipoteca, los recibos de la casa o una cesta de la compra digna.