BBVA, a través de sus programas de emprendimiento, ha destinado casi 9 millones de euros a proyectos e iniciativas innovadoras durante 2018, de los que se han beneficiado a 2,2 millones de personas emprendedoras. Esto es: menos de un millón que los 10 millones facturados por el excomisario José Manuel Villarejo al banco, supuestamente para espiar y seguir a miembros del Gobierno, de los organismos reguladores y de la competencia por encargo del que fuera presidente de la entidad, Francisco González. 

El emprendimiento ha ocupado un lugar importante en el Plan de Inversión en la Comunidad 2016-2018 de BBVA, según ha trasladado el banco en un comunicado. Un lugar menos importante que los espionajes que los espionajes del excomisario, si hemos de medirlo en dinero. Según publicó el diario El País el pasado mes de marzo, el BBVA realizó pagos a Cenyt, la empresa del excomsiario en prisión. El montante total de los pagos a Cenyt, desde 2004 a 2017, asciende a 10 millones de euros, la décima parte del presupuesto anual del BBVA en seguridad. Según el banco, que ha reconocido los pagos, las facturas se corresponden con trabajos que, en teoría, tenían como objetivo buscar propiedades de clientes morosos. 

El banco, que trata de lavar su imagen sin resolver la investigación sobre la relación de FG con Villarejo, enumera hoy varias iniciativas globales relacionadas con el emprendimiento, como los programas BBVA Momentum, Fundación BBVA Microfinanzas, BBVA Open Talent y BBVA Blue Challenge, que van dirigidos, según indican, a emprendedores en situación de vulnerabilidad y a aquellos que sus proyectos generaron un impacto positivo en la sociedad o en el medioambiente. Que en cualquier caso han percibido menos que José Manuel Villarejo, actualmente en prisión. 

Desde que estallara el escándalo de las escuchas supuestamente encargadas por FG, el banco ha reconocido que inició una "investigación interna", encargada por el propio Francisco González y una externa, encargada por su sucesor, Carlos Torres Vila. Diez meses después el banco no ha revelado ningún detalle relativo a estas pesquisas, en las que trabajan los bufetes de abogados Uría Menéndez, Garrigues y la auditora PwC. También ha ignorado los mensajes del Banco Central Europeo, el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores para aclarar lo sucedido cuanto antes. 

Francisco González, mientras tanto, pese a haber dimitido "temporalmente" como presidente de honor del BBVA y de la Fundación BBVA, ocupó hasta la semana pasada un despacho en la antigua sede de Argentaria en el Paseo de Recoletos de Madrid y disfrutó de los servicios de chófer, secretaria, tarjeta y seguridad pagados por el banco. Ahora sólo disfruta de los servicios de seguridad. FG ha sido el banquero mejor pagado de España, pese a que nunca consiguió situar al BBVA como el primer banco del país. También disfruta de una de las jubilaciones más caras de Europa.