En un acto celebrado ayer en Murcia, el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri manifestó que la entidad que preside no cambiará las condiciones de sus hipotecas y que, por lo tanto, no trasladará el coste del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) a sus clientes, subrayando que hay que “escuchar lo que la sociedad nos está reclamando” porque “es evidente que está muy decepcionada con el funcionamiento del sistema financiero durante la crisis”, pero ha advertido de que “mantener una permanente sospecha sobre el sistema financiero hace que, a todos los niveles, se puedan tomar decisiones que, aunque en el corto plazo cosechen aplausos, al final son malas para el conjunto de la sociedad”, en una posible referencia a los cambios legislativos urgentes del Gobierno con respecto a las hipotecas

Errores del pasado y seguridad jurídica

En este sentido, ha explicado que el sector, para que sea sólido, “debe ser rentable y transparente” ya que, si la rentabilidad está por debajo del coste de capital que requieren los inversores, el sistema será una “rémora”, porque estará infracapitalizado y no podrá financiar a su economía, siendo un freno para el desarrollo del país. Goirigolzarri ha reconocido que “Bankia es un paradigma” porque “supuso el reconocimiento de los errores cometidos en el pasado” y “el establecimiento de una clara diferenciación entre el pasado y la gestión actual”.

“Mientras desarrollamos lo anterior, debemos explicar a la sociedad cuál es nuestro papel”, ha apuntado, para incidir después en que “debemos hacer ver que un sistema financiero sólido es imprescindible para asegurar un crecimiento sostenible de la economía española, que es, a su vez, el medio para asegurar un mejor nivel de vida a los ciudadanos y la condición necesaria para luchar contra el desempleo”.

Mercado hipotecario muy competitivo

Igualmente, el presidente de Bankia ha recordado que las hipotecas españolas tienen los tipos más bajos de Europa, junto con Portugal y Finlandia, y que el actual sistema hipotecario, “con sus indudables posibles mejoras”, ha sido “muy positivo para la sociedad española” y ha permitido el acceso en propiedad a la vivienda al 80% de la población, cifra muy superior a la del resto de Europa.

El anuncio de Goirigolzarri confirma los pronósticos de que la alta competitividad entre las entidades que conceden préstamos hipotecarios resta incentivos a encarecer las hipotecas, pese a que los bancos tengan que asumir ahora más costes que en el pasado. Además, la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), aseguró la semana pasada que estaría vigilante, para evitar que los bancos decidan concertar precios de cara a una eventual subida.