El beneficio neto del Grupo ACS creció un 5,1% hasta los 962 millones de euros en 2019, debido a la positiva evolución operativa en todas las áreas de su actividad. Además, el EBITDA creció un 7% hasta los 3.148 millones de euros mientras que el beneficio neto de explotación alcanza los 2.126 millones de euros tras aumentar un 3,7%.

El impacto en el grupo de Florentino Pérez por el cierre de operaciones de la filial Cimic en Oriente Medio ha sido compensando con los resultados obtenidos por las desinversiones de activos de energía renovable en 2019, así como por la aplicación de una provisión por riesgos internacionales, según ha informado la propia compañía a la CNMV.

Las ventas de ACS aumentaron un 6,5% el pasado año, hasta los 39.049 millones de euros, gracias a la solidez del grupo en los mercados norteamericano, australiano y español, los más importantes del grupo. De hecho, las ventas en América del Norte suponen la mitad del total, las de Europa un 20% y en Australia un 19%. Por su parte, las ventas en España suponen un 14% del negocio de ACS. 

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En la misma línea, estos países son precisamente los que contribuyen con un 82% del total de las ventas, con un 43% en el caso de Estados Unidos, un 19% en Australia y un 14% en España.

Por otro lado, la cartera de ACS se situó en los 77.756 millones de euros al cierre de 2019, un 7,7% más que el año anterior. En este caso, el 44% de la cartera corresponde a América del Norte, el 25% a Australia y el 18% a Europa, seguido muy de lejos por el negocio del grupo en América del Sur y Asia.

El beneficio crece en todas sus áreas

Por áreas de actividad, el beneficio del área de Infraestructuras creció un 4,6% tras la incorporación de Abertis desde junio de 2018. Así, la contribución en 2019 alcanza los 245 millones de euros frente a los 175 millones registrados el año anterior.

Por otro lado, el área de Construcción incluye a Dragados, con un beneficio de 117 millones. En este área también se encuentra Hochtief, que redujo su contribución al beneficio neto operativo del Grupo por la menor participación, del 71,8% al 50,4%, por la venta de Atlantia en el cuarto trimestre de 2018.

El área de Servicios Industriales creció un 7,8% hasta los 350 millones de euros gracias al repunte de la actividad en el mercado español. Sin embargo, estos resultados no incluyen los beneficios obtenidos por las desinversiones en activos de energía, principalmente la venta parcial de las plantas fotovoltaicas en España en el mes de diciembre.

El endeudamiento neto del grupo permanece casi inexistente, según la propia compañía, en los 54 millones de euros, niveles muy similares a los de los dos años anteriores. Los flujos de fondos generados por las actividades antes de inversiones han permitido a ACS mantener una sólida posición financiera e incrementar significativamente la remuneración a sus accionistas y socios minoritarios.

ACS ha invertido un total de 1.254 millones de euros durante el pasado año, especialmente a través de las inversiones operativas netas, con 659 millones, correspondientes a la adquisición de maquinaria y equipamiento para los proyectos del grupo. Además, las inversiones financieras y en proyectos han superado los 1.000 millones de euros.

En cuanto al pago de dividendo a sus accionistas, ACS ha abonado 195 millones de euros en 2019 y ha adquirido 568 millones de euros en acciones propias destinadas al pago del dividendo flexible.