El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, ha afirmado que el acuerdo entre el Gobierno central y la Generalitat para la promoción del catalán en el Senado, el Parlamento Europeo y en foros internacionales, sería extensible al euskera, porque así lo plantea el propio pacto para el resto de lenguas cooficiales, como demandan los ejecutivos autonómicos.

En declaraciones a Radio Popular, ha proclamado que las negociaciones bilaterales abren "alguna nueva puerta" para que todas las autonomías con lenguas cooficiales tengan la posibilidad de "acceder" a estas prerrogativas.

Zupiria ratificaba que el asunto de la inmersión lingüística está estrechamente relacionado “con el mundo educativo”. En el caso de Euskadi, el portavoz del Ejecutivo recuerda que se "ha trabajado, consensuado, dialogado y negociado durante muchos años" con el fin de que el modelo lingüístico no suponga un conflicto interno. 

El portavoz del Gobierno vasco ha adelantado que en los últimos años se han dado “grandes pasos” en lo relativo al euskera, así como el acuerdo en el que está trabajando el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, con los grupos de la oposición, para asentar las bases de un modelo educativo que aboge por la "convivencia" y apueste por el uso "natural" de las dos lenguas oficiales e incluso una tercera y una cuarta.

Consenso para el euskera

Zupiria resaltaba que desde el Gobierno vasco se está construyendo una idea que se sustenta sobre "dos patas fundamentales": un "gran" consenso político y social y las "posibilidades" que este clima ha ofrecido a la "normalización y aprendizaje" del euskera. "Ese es el camino que tenemos que seguir", ha resuelto.

Rechazan, por tanto, que la labor autonómica "vaya con fórceps" y se impongan "resistencias" para el cumplimiento del Estatuto, por lo que espera que en la reunión de este viernes con la consejera de Autogobierno, Olatz Garamendi, y la ministra de Política Territorial, se pueda avanzar en este sentido. Asimismo, el portavoz ha aludido al proceso de desarrollo del Estatuto y a las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre algunas competencias "intransferibles". 

En suma, Zupiria estima que se debería "haber convertido en hechos" de manera inmediata y ha lamentado que, cuatro décadas más tarde", existan "resistencias para que se pueda cumplir aquel autogobierno admitido y reconocido" en el Estatuto de Gernika. 

Según ha indicado, está siendo "muy costoso", pero ha añadido que insistirán para que "se cumpla la ley". Así, ha agregado que sería "bueno" que este viernes se pudiera avanzar, subrayando que es "un compromiso de todas las partes". "Y si nos hemos comprometido todos a que eso sea así, hagamos lo posible", ha abundado.

Blindaje a las lenguas cooficiales 

El también consejero de Cultura ha añadido que es una obligación constitucional proteger todas las lenguas del Estado español y eso "no se está haciendo" porque los poderes centrales del Estado "no se han comprometido con la normalización de las otras lenguas que no son el castellano". Por ello, ha manifestado que es algo en lo que van a seguir insistiendo porque "está en juego el futuro de muchas de estas lenguas".

Bingen Zupiria ha sostenido que la administración está en manos del Gobierno central y por ello,"no se ha comprometido con la normalización del euskera, en nuestro caso".

"No tiene planes de normalización, no tiene diagnóstico sobre el nivel de conocimiento y el uso del euskera en su administración, no tiene un diagnóstico de si se está cumpliendo o no la obligación que tienen de atender en euskera a quien así quiera ser atendido. Este aspecto es muy importante, va más allá del acuerdo que ayer firmaron. Si es un acuerdo en esa dirección será bienvenido, es algo que todos los responsables institucionales de las comunidades autónomas que, además del castellano tenemos otra lengua oficial, llevamos años pidiendo", declaraba.

Zupiria ha asegurado que "todos los que hablan en nombre de una España plurilingüe deberían mostrar ese compromiso con el desarrollo de la pluralidad de lenguas oficiales que hay en el Estado español". Ha recordado que, como ciudadano vasco bilingüe, tiene derecho a ser atendido en las dos lenguas oficiales "en cualquier administración de mi país, sea la que depende del Gobierno vasco, de las diputaciones, de los municipios o del Gobierno del Estado" y esto "no sucede así".

¿Qué sucederá con la EBAU?

Respecto al nuevo borrador diseñado por el Gobierno sobre los exámenes de la EBAU, Zupiria apuntaba que el consejero de Educación ha mostrado su preocupación por el anuncio del departamento de Pilar Alegría sobre la nueva puerta de acceso a los grados universitarios.

Según ha destacado, "no se han cumplido las formas" porque "lo lógico" sería que, en una comunidad autónoma como Euskadi, con plenas competencias en materia de educación, "si hay que adoptar alguna instrucción o directriz superior a nivel estatal, haya una conversación previa entre administraciones para que el Gobierno vasco sepa de las intenciones del Ministerio de Educación y cuál es el planteamiento que llevará a una comisión en la que están todas las comunidades".

La preocupación que plantean desde el Gobierno vasco es que se cuestione la "competencia exclusiva", mientras recuerda que en Euskadi ya hay un pacto educativo. "De repente no puede caer del cielo o encima una prueba de acceso a la universidad que no sea consecuente y que no tenga en cuenta estas decisiones que se están adoptando en Euskadi para el desarrollo del sistema educativo", ha lamentado.

Además, ha indicado que Bildarratz denunció que la propuesta nace con "vocación de homogeneizar". "Nosotros nos vamos a resistir a esa homogeneización porque vivimos en una comunidad que tiene sus propias características que deben de ser la base de nuestro sistema educativo y también del acceso de nuestros jóvenes al sistema universitario", ha dicho.

A su juicio, es "difícilmente compatible" la voluntad que ayer mostró Moncloa en el acuerdo con el Govern para la no judicialización de la política y para la normalización del uso del catalán con que "el mismo día la ministra de Educación vaya una conferencia sectorial y, sin haber hablado y trabajado previamente una propuesta de la prueba de acceso a la universidad, se haga el planteamiento que se ha hecho y que hace abstracción de esa realidad plurinacional y pluricultural que existe en el Estado español".