Al “caos” derivado de la adjudicación de plazas del profesorado de la Comunidad de Madrid, los sindicatos lamentan ahora otro hecho que tiene que ver con el recorte de la plantilla y es que, según los cálculos de Comisiones Obreras (CCOO), el presente curso comenzaría con 426 profesionales menos que el anterior en Secundaria y régimen especial, pasando de 8.963 a 8.537.

Además, después de estudiar las asignaciones realizadas, CCOO concluye que la Consejería ha dejado sin adjudicar 1.353 vacantes, con ejemplos muy concretos como Biología, donde los 396 puestos existentes sólo se han asignado a 219 personas; o Tecnología, donde han quedado sin asignar todas las vacantes de puestos a jornada parcial, compartidos o itinerantes.

El consejero de Educación, Ciencia y Universidades, Emilio Viciana, ha presentado esta semana un informe con datos que ha defendido frente a la opinión pública según el cual la región liderada por Isabel Díaz Ayuso bate récord en el número de docentes para la temporada 2023/2024, ya que los colegios e institutos públicos contarán con 63.041 después de que este mes se incorporen otros 2.000. Esto supone “casi el doble” que el curso pasado, según el Partido Popular, pero lo desmienten desde CCOO.

“El consejero no se ha reunido con la comunidad educativa y se nota, porque ha presentado una visión unilateral. Nos ha resultado muy continuista. Muchos datos, pero cuando éstos se contrastan con la realidad, demostramos que no son ciertos”, responde la secretaria general de la Federación de Enseñanza del sindicato.

El hecho culmina el proceso de errores administrativos “masivos” y sin precedentes que llevaron a que a tan solo diez días del inicio de las clases hubiera todavía muchos profesores que no supieran a qué centro del territorio debían acudir. Esto provocó que las listas definitivas se demorasen más de lo habitual y cuando por fin salieron todavía contasen con fallos. “A diez días hábiles del curso se publicaron las listas definitivas y aún sigue habiendo centenares de errores. Pero, además, se asignan menos puestos que el curso pasado y se dejan vacías las vacantes existentes. Es gravísimo”.

Uno de los puntos de esta deficiencia, asume el agente social, pasa por el sistema de asignación de plazas en Madrid Digital, el ente público madrileño que organiza los procesos informáticos de la administración y que se equivocó claramente al medir los tiempos: “Las oposiciones de reposición se convocaron en enero de 2022, las de estabilización en diciembre del mismo año, pero el proceso de asignación no se preparó a tiempo (…) En vez de organizar lo que le venía, el anterior consejero de Educación emprendió una batalla contra el Gobierno de España convocando dos procesos el mismo año, y se ha demostrado -como CCOO advirtió hace más de un año- que no tenía capacidad para ello”.

En este sentido, el agente social pide explicaciones de lo que ha hecho el Ejecutivo regional en este apartado a pesar de un incremento del 48,3% en el presupuesto.

Ya ocurrió el año pasado

La falta de profesores al inicio de curso es una cuestión que se repite año tras año. Al menos, el inicio del 2022 también estuvo incompleto en este sentido, ya que los educadores se asignaron la tarde de antes en varios centros. En números concretos, CCOO se refirió a la falta de unos 1.500 profesores y de hasta ocho en algunos centros. Otros números que arrojan luz a esta cuestión es que el año pasado se asignaron 7.861 profesores a finales de julio y este año la cifra es de 7.184 a finales de agosto, lo que se traduce en un claro “recorte de plantilla”.

En la misma línea, el sindicato denunciaba “cierres” en unidades de primaria y que algunos profesores habían sido desplazados, así como otras cuestiones relacionadas con las prácticas, que no “se encontraban reguladas” o una sobrecarga de trabajo que no se entendía con la ampliación de las ratios. También señalaba que algunos colegios o institutos estaban inacabados y la falta de actuación del gobierno de Ayuso para con la retirada del amianto.

Errores en las listas

Las listas definitivas se presentaban el pasado 21 de agosto en un contexto en el que las alegaciones de los afectados llegaron a las 4.000, según CCOO, quien tuvo incluso que “reforzar” su asesoría jurídica.

Discriminación de la pública

Galvín subraya que “no asignar las vacantes a tiempo supone un ahorro para la consejería porque hacen las contrataciones más tarde y se ahorran días de trabajo del profesorado”. “Es muy negativo para el sistema porque empieza el curso sin los profesores necesarios, pero sobre todo no se atiende al alumnado cuyo profesor no está”, lo cual “deteriora la imagen de la educación pública y vulnera el derecho a la educación del alumnado cuyo profesor no está, pero también las condiciones del profesorado porque agudiza su precariedad y vulnerabilidad, y esto en el caso de que finalmente se hagan las contrataciones, porque si no estamos hablando de un recorte más en la enseñanza pública”.

Galvín habla de problemas “estructurales” que, lamenta, la Consejería “no tiene intención de revertir”. “No se ha referido a que hay que revertir la situación de financiación en Madrid -la comunidad que menos invierte de España en Educación-, de que las políticas educativas generan la tasa más alta del país de desigualdades y desequilibrios… Y tampoco la discriminación que sufre la escuela pública en cuando al trato que se da a la concertada y a la privada”, culmina.