El fenómeno del sinhogarismo sufre una tendencia al alza en España incrementándose en el ámbito estatal casi un 25% en el periodo 2012-2022, aumentando el número las mujeres, de personas jóvenes y de personas de origen extranjero. En la Comunidad de Madrid crece un 17% entre 2012 y 2022, pasando de 3.532 personas a más de 4.100, según datos del INE.
Pero el problema del sinhogarismo no afecta únicamente a inmigrantes o personas desempleadas. Cada vez son más los trabajadores y las trabajadoras que, pese a contar con un empleo, no pueden acceder a una vivienda digna en Madrid por sus elevados precios. Esta situación está empujando a muchas personas a buscar refugio en lugares no diseñados para ello.
Así podemos entender el perfil de las 421 personas que pernoctan en el aeropuerto. Muchos trabajan, pero no tienen hogar. Viven, por lo tanto, en situación de alta vulnerabilidad.
En las últimas semanas hemos presenciado el enésimo debate competencial sobre la administración encargada de dar solución a estos hombres y mujeres. Pero lo cierto es que la Constitución recoge en el artículo 148.1. 20ª que las comunidades autónomas podrán asumir competencias en materia de asistencia social, y la Comunidad de Madrid, así como el resto de las comunidades, asumieron en sus respectivos Estatutos la competencia exclusiva en materia de servicios sociales.
El problema es, por un lado, que la Comunidad de Madrid carece de una estrategia sobre el sinhogarismo. La última fue el Plan de Inclusión de Personas sin Hogar 2016-2021, lo que muestra su falta de interés por las cuestiones sociales y en concreto por las personas sin casa. También muestra una gran indolencia para aportar recursos, ni lo hace desde sus competencias en cuanto a vivienda, sanidad u otros sistemas de protección social necesarios.
Además, la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local establece en sus artículos 25 y 26 que el municipio puede ejercer competencias en materia de servicios sociales para la gestión de sus intereses.
Las entidades locales son, por tanto, las que implementan los programas de prevención y la detección precoz, la transformación de los modelos de intervención, los servicios comunitarios, la experimentación e innovación y la no criminalización de la pobreza en el espacio público con la competencia de ofrecer servicios básicos de urgencia y emergencia basados fundamentalmente en el alojamiento, la manutención y la atención social directa desde el acompañamiento de los profesionales.
Se puede decir que el Ayuntamiento de Madrid no ha sido capaz de ejercer sus competencias al no hacer una detección precoz del problema que se estaba produciendo con las personas sin hogar en el aeropuerto. Entre otros motivos por falta de planificación ante una situación conocida desde hace más de una década (llegando a aumentar en 10 años de 40 a 421 personas) y teniendo en cuenta que el 50% llevan durmiendo allí más de 6 meses y se encuentran en situación de urgencia social, según denominación de la Ley de Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid.
Pero la falta de planificación y de datos fiables no es una novedad en el Ayuntamiento de Madrid. Desde 2006 se venía realizando un recuento nocturno anual de personas sin hogar, pero a partir de 2022 este método es sustituido por los equipos de calle, que son los encargados de realizar un nuevo método de recuento diario. Un nuevo sistema que dificulta la comparación con datos anteriores. Con todo, la red municipal es claramente insuficiente y no da cobertura a las necesidades de las personas sin hogar de la ciudad, que se calcula en 2.414.
En estos momentos el Ayuntamiento de Madrid sí dispone de recursos como los centros de acogida -anteriormente albergues municipales-, centros de día, y programas de acompañamiento y apoyo social, así como la atención en emergencia en campañas específicas, como la campaña municipal contra el frío que hoy en día permanecen cerrados y que supondría 432 plazas diarias fijas a disposición de quienes ahora viven en Barajas.
Lejos de aportar soluciones urgentes y efectivas, todo apunta a que el equipo de gobierno municipal está haciendo una dejación de sus competencias con las personas sin hogar del aeropuerto.
El Grupo Municipal Socialista vuelve a exigirle al alcalde de Madrid, como máximo responsable, que dé una solución a estas personas, invisibles, que podemos ser cualquiera mañana.
Ana Lima es responsable de Servicios Sociales del PSOE-M en el Ayuntamiento