Este lunes el comité de huelga de la Atención Primaria estaba llamado a una nueva jornada de negociaciones con el equipo de Isabel Díaz Ayuso para tratar de desatascar una situación que lleva encallada desde el pasado mes de noviembre, cuando los médicos y pediatras de la Comunidad de Madrid comenzaron una huelga indefinida que se extiende ante la falta de acuerdos persistente.
La parte que defiende a los profesionales de la Salud en la mesa lamenta una vez más las formas y el fondo de esta última reunión, a la que, de nuevo, no ha acudido el consejero Enrique Ruiz Escudero. Asimismo, afea que la región les haya tumbado sus propuestas asumiendo que solo “cambian las cosas” cuando lo que han intentado, aseguran, ha sido “disminuir las líneas rojas” pese a “sentirse refrendados por la manifestación de ayer” y el apoyo tanto de los vecinos como de los compañeros de profesión.
“Hemos hecho un esfuerzo adicional para bajar de los 479 euros a 400 y, lo que siempre ha sido más importante, hemos pedido la incentivación del 15% en vez del 25% para que se rellenen las plantillas de la tarde”, ha explicado Ángela Hernández, responsable del sindicato AMYTS y una de las caras visibles de los parones sanitarios. “La CAM sigue diciendo que es la que más oferta entre la mañana y la tarde, pero esto es una falacia, la tarde está desprovista de pediatras y con serios problemas para cubrir a los médicos de familia”.
En la misma línea, Hernández defiende que en estas diez semanas “nunca han cambiado” su postura, pese a lo que mantiene el departamento de Ruiz Escudero, salvo el día de hoy, cuando han hecho una “reestructuración” para pedir un “mínimo” para la Atención Primaria.
En esa dirección, se refiere a un “plan de choque presupuestario” al que Sol “siempre se ha negado”. “Esto es estrictamente necesario, sobre todo teniendo en cuenta que hay 300 especialistas de medicina de familia y pediatría que, en función de lo que hagamos, se quedan en la CAM o se buscan otros horizontes en mayo (…) Pero es muy difícil llegar a un acuerdo porque no hay plan para reflotar la situación de la Atención Primaria.
Ayuso insiste en tildar de “política” la huelga, pese a la manifestación multitudinaria
Lo que es evidente es que el personal sanitario se siente apoyado y con más fuerzas que nunca para marcar las condiciones -aun siendo conscientes de que tendrán que rebajar algunos puntos- tras la imagen del pasado domingo en Cibeles, donde llegaron 250.000 personas según Delegación de Gobierno y un millón si se obedece a las cifras de los organizadores.
La presidenta de la Comunidad, sin embargo, sigue poniéndose de perfil frente a las reclamaciones y ante lo que cobra más fuerza: la instantánea panorámica en la que se ven las calles absolutamente abarrotadas de gente. La líder regional no ha tardado en salir en las últimas horas a defender un argumentario que, por otra parte, cae -por segunda vez en unos tres meses- por su propio peso. Así las cosas, la responsable popular ha vuelto a tildar de “política” una marcha que ha desautorizado al asegurar que se organizaba bajo “el pretexto de la sanidad pública” y "demostrar la frustración de la izquierda".
Otras voces del partido se han pronunciado de forma similar. De este modo, su número dos, Enrique Ossorio, sostiene que están “intentando reventar el mejor sistema sanitario que hay en España”, a la vez que insiste en que la Comunidad “nunca” ha tenido una partida tan alta destinada a sanidad, obviando que es la que menos invierte de España.
Ruiz Escudero, por su parte, defendía tanto en el día de ayer como hoy que “solo hay que analizar el motivo de la convocatoria y uno saca las conclusiones bien claras de que es una manifestación puramente política”. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, también ha opinado sobre la cuestión. “No crean plazas de médico, no amplían la oferta de los MIR, no hay médicos de atención primaria, no hay pediatras y la culpa la tienen los presidentes del PP. Sorprendente conclusión”, ha apelado.
