En esta ocasión, los debates plenarios en las Cortes de Castilla y León no son noticia por gestos obscenos ni por insultos, ni siquiera por la reiteración del argumento de la amnistía como respuesta a cualquier propuesta de la oposición, sino por la clamorosa ausencia del Gobierno PP-Vox durante la presentación por parte del Partido Socialista de una proposición que perseguía mejorar la atención a las mujeres de la Comunidad en la prevención del cáncer de mama.

La procuradora socialista Rosa Rubio, a quien Mañueco regaló la famosa ‘peineta’ que después negó, defendía esta mañana, en base al incremento de casos, la ampliación del cribado de detección de cáncer de mama mediante mamografía a mujeres hasta los 74 años, extendiendo la cobertura por encima de los 69, que es la edad de corte según el procedimiento actual de la Junta de Castilla y León, algo que beneficiaría a 58.000 mujeres y tendría un coste de 4 millones de euros.

Ni siquiera el consejero de Sanidad

Pero Rubio lo hizo en ausencia del presidente, Alfonso Fernández Mañueco, el vicepresidente, Juan García-Gallardo, y todos los consejeros, incluido el de Sanidad, y con la única excepción de la consejera de Familia, Isabel Blanco, única miembro del Gobierno que permaneció en su asiento.

El vacío de la bancada azul se produjo durante el debate de una proposición no de ley en la que el PSOE planteaba a la Consejería de Sanidad -cuyo titular no se encontraba en la sala- que propusiera en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la incorporación de las recomendaciones del Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer sobre los programas de cribado de cáncer de mama a la Cartera de Servicios y Prestaciones con la finalidad de alcanzar un acuerdo que permitiera "dotarlo en su conjunto de los medios humanos y materiales precisos".

A pesar de mantenerse ajenos al debate, los procuradores de ambos grupos en el Gobierno, Partido Popular y Vox, votaron en contra de la propuesta, aduciendo algunas veces a la competencia estatal en Sanidad y otras, como no podía ser menos, al acuerdo de condonación de deuda alcanzado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con Cataluña.

"Menos condonar deuda a sus socios separatistas y más apoyo a la investigación contra el cáncer", declamó la procuradora de ultraderecha Susana Suárez Villagrá, sola en el atril ante la estampida de sus líderes en los escaños azules, que denunció los diecisiete sistemas sanitarios del país y acusando al PSOE de rechazar peticiones de financiación para fármacos y tratamientos en 2022, que después aceptó. "Para los enfermos de cáncer de mama no, pero para comprar el sillón del golpista a sus socios separatistas, sí", añadió.

Mientras, la procuradora del Partido Popular, Ángeles Prieto, se remitió al procedimiento y la necesidad de estudios de efectividad clínica y coste-efectividad, algo que, señala, corresponde al Ministerio de Sanidad. "Vuelven a ejercer ustedes la oposición chusquera", concluyó, "con la Sanidad no se juega, y con la salud no se hace política, y no todo vale para conseguir un titular y colgarse una medallita".

Aumento de casos

Por su parte, la procuradora del PSOE, Rosa Rubio, mostró una gráfica que recoge el aumento de casos de cáncer de mama en Castilla y León y lamentó la ausencia del consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, que, dijo, "está avergonzado de esta gráfica, que es el aumento de los casos de cáncer de mama, que no quiere ver, porque no la combate".

Rubio agradeció el apoyo del resto de los grupos a la proposición que rechazaron PP y Vox y también tuvo ironía para la procuradora de extrema derecha: "Señora Suárez Villagrá, ustedes piden más dinero para investigación... ustedes que no creen en la ciencia; y piden igualdad de trato entre las autonomías, que tengamos un solo servicio de salud... lo que quieren ustedes es cargarse las comunidades autónomas, y viene usted aquí a decir que eliminemos los diecisiete sistemas sanitarios que tenemos en nuestro país, ¿qué hace usted ahí sentada?, si esta es la comunidad de Castilla y León y esto es el Parlamento Autonómico... es que son ustedes incongruentes del principio al final, pero le quedan a ustedes dos meses. Aprovechen", zanjó.