Los familiares de usuarios de las residencias de mayores de Galicia continúan con su particular batalla para paliar lo que consideran la injusticia que se está cometiendo con los ancianos y sus seres queridos. Se refieren al régimen de visitas que han de seguir para poder estar con sus mayores.

Hoy han querido respaldar a la asociación TreGa, Traballadoras de Residencias de Galicia. Estas profesionales se han concentrado este lunes antes el edificio que acoge a la delegación de la Xunta en la ciudad de Vigo.

Según han explicado, el motivo de la protesta ha sido la petición al Gobierno regional de que elimine de una vez “las citas previas” para que familiares y usuarios de estos centros puedan verse sin limitación alguna puesto que “es puedan verse sin cortapisas, puesto que “las empresas las utilizan para restringir la entrada de las familias en los geriátricos, lo que sigue produciendo dolor y deterioro de la salud psíquica y física en los residentes”.

En el acto celebrado hoy han recibido el apoyo de REDE, Federación Galega de Usuarias y Familiares de Residencias; CRAPD, ASFAREBA y Vellez Digna. Tal y como han puesto de manifiesto, estos centros “no son cárceles”, sino que son las “viviendas de las personas mayores, las únicas personas de nuestra sociedad (sin sentencia judicial) que no gozan de todos los derechos en su plenitud”. Entre esos derechos citan los fundamentales derecho a la libertad, a la dignidad humana y a la intimidad, el que permite la libre circulación y residencia, así como el que consagra la igualdad de todo ciudadano ante la ley.

En palabras de Paulino Campos, presidente de REDE, aquello de lo que ha presumido la Xunta de Galicia a bombo y platillo y que fue denominado desde la administración que preside Alberto Núñez Feijóo como 'la vuelta a la normalidad' en las residencias “ha sido un fiasco absoluto. Ni siquiera las familias pueden acceder a las habitaciones de sus parientes, ni en buena parte de estos centros se pueden visitar a los residentes en fin de semana”. La conclusión es que, a su juicio, es “un horror” que sitúa Galicia “a la cola del Estado español" en esta materia.

Al margen de lo anterior, los familiares concentrados ante la delegación viguesa de la Xunta, la mayor parte procedentes del CRAPD de Vigo, la residencia pública más grande de Galicia, pidieron a la administración autonómica "transparencia, diálogo, más inversión en los centros públicos, creación de órganos de representación de familiares y usuarias en residencias”.

Del mismo modo, durante la protesta también recordaron el varapalo dado por el Partido Popular apoyado en su mayoría a la comisión de investigación para determinar qué ocurrió en las residencias públicas y privadas de Galicia durante la pandemia.

No es la primera vez que las familias de usuarios de estos centros llevan a cabo protestas por la falta de información clara de lo sucedido en estas instalaciones en las que fallecieron cientos de personas y miles resultaron contagiadas por el Covid-19.

Uno de los motivos que según las entidades que engloban a los trabajadores del sector se encuentra detrás de los dramáticos datos es la precariedad laboral y la falta de recursos materiales y humanos que arrastran ls residencias desde hace años. Hoy, precisamente, los trabajadores también reclamaron mejorar en sus condiciones de laborales.