Una vez más, la provincia de Pontevedra vuelve a ser noticia por culpa del narcotráfico. Hoy, Policía Nacional y Guardia Civil desarrollan un operativo especial contra las bandas que se dedican al tráfico de drogas y que se une a la llevada a cabo hace unas semanas contra un grupo criminal dedicado a la fabricación de las llamadas narcolanchas.

Hasta el momento, el dispositivo, que no se da por concluido, se salda con, al menos, 20 detenciones practicadas en la provincia pontevedresa.

Dichos arrestos, así como diferentes registros, se han producido en las localidades de Ponteareas, Barro, A Lama, Cambados, O Grove, A Illa de Arousa, Caldas de Reis y Moaña. No obstante, al margen de los esto, también se han practicado otros registros en naves situadas en Portugal, para lo que se ha contado con la colaboración de la Policía Judiciaria lusa.

En este sentido, tal y como han explicado fuentes próximas a la investigación, la operación ejecutada en la provincia de Pontevedra presenta ramificaciones en el país vecino y tiene una conexión directa con la mencionada operación centrada en la fabricación de embarcaciones para trasladar a tierra droga.

El dispositivo denominado Kerumán- Samario ha sido puesto en marcha este martes en Galicia y que está coordinado por el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Cambados. En él participan agentes de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) del Cuerpo Nacional de Policía y del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil.

Cabe recordar que en la operación anterior similar a esta, la organización criminal desarticulada en Pontevedra tenía infraestructura establecida, además de en la citada provincia del sur de Galicia, en A Coruña, Salamanca, Madrid y Barcelona y en los municipios portugueses de Viana do Castelo y Valença do Miño.

Esta banda se dedicaba a la fabricación de embarcaciones de alta velocidad empleadas para el narcotráfico y en su desmantelamiento participó la Guardia Civil, la Policía Nacional y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria.

En el marco de este dispositivo conjunto, denominado 'Munari-Cundinamarca-Tulipán', los funcionarios policiales llegaron a detener a 22 personas y realizaron 27 registros en domicilios y lugares de seguridad de los investigados.

Operación similar

En esas entradas fueron intervenidas más de una veintena de embarcaciones de alta velocidad, una parte de las cuales estaban listas para ser utilizadas para el traslado de sustancias estupefacientes.

Precisamente, mientras en diferentes ubicaciones de la provincia de Pontevedra se llevaba a cabo la fabricación de las narcolanchas, según pudieron determinar los investigadores, era en Portugal donde les daban los últimos detalles.

De los arrestados entonces, 12 pasaron el pasado día 8 de abril a disposición judicial en Cambados, tras lo que la jueza instructora decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza para ocho de ellos. Para los cuatro restantes, determinó su puesta en libertad y les ha impuesto como medidas la retirada del pasaporte, la prohibición de abandonar el territorio nacional y la obligación de comparecer en el juzgado cuando sean llamados.

Todos ellos están investigados por un delito continuado de contrabando, un delito de pertenencia a organización criminal y un delito contra la salud pública, según confirmó el juzgado.

Sobre la situación procesal de los detenidos hoy en los citados municipios de Pontevedra todavía se desconoce su destino, si bien sí se ha sabido que alguno de ellos se encuentra entre los considerados históricos del narcotráfico gallego.

A pesar de que en un primer momento desde diferentes medios de comunicación se habló de que ambas operaciones estaban relacionadas, la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, ha negado durante un acto celebrado en el cuartel de la Guardia Civil de Vilanova de Arousa este extremo y ha asegurado que, en realidad, se trata de dos operativos diferentes.