Era lo esperado, porque así lo habían adelantado desde el Partido Popular horas antes con fotografías incluidas del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, preparando el debate. De este modo, hoy salió a la palestra del Parlamento regional para desplegar lo que calificó como "senda propia" de Galicia a la hora de plantear un cambio fiscal.

El sucesor de Feijóo, curiosamente, vendió un 'camino impositivo gallego' propio, pero muy parecido -por no decir casi idéntico- al planteado por otras regiones 'populares' como Madrid, Murcia o Andalucía. Aún así, Rueda insistió en que sus medidas avanzan en ese "senda propia" en esta materia puesta en marcha por su antecesor en el año 2009, momento en el que accedió a la presidencia de la Xunta Alberto Núñez Feijóo

Aplauso tras aplauso es lo que ha ido cosechando el máximo responsable político de Galicia. A ello han contribuido frases como que las rebajas fiscales "han permitido un ahorro de 1.200 millones de euros" en este tiempo. Y entonces llegó el anuncio estrella. Alfonso Rueda se comprometió a ejecutar una rebaja de los primeros tramos del Impuesto sobre las Rentas de las Personas Físicas en su tramo autonómico con el objetivo de deflactar este gravamen para las rentas de hasta 35.000 euros para hacer frente a la inflación y con efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2022. 

De nuevo aplausos de la bancada 'popular'. Los números desgranados después, sin embargo, desinflaron el espíritu anti-impositivo al que se han lanzado las Comunidades Autonómas gobernadas por el PP. 

Imagen distribuida ayer por la Xunta de Alfonso Rueda preparando su comparecencia de hoy (Foto: Xunta de Galicia).

En total, según las previsiones del propio Gobierno gallego, la medida beneficiará aproximadamente a un millón de gallegos. Lo llamativo tiene que ver con lo que se van a ahorrar cada uno de ellos en su próxima declaración de la renta de media: 46 euros por cabeza.  

Tal y como explicaron a Europa Press fuentes del Partido Popular regional esta modificación supone que los límites que marcan el salto de un tramo al otro, incluido el que establece aquellas personas que están exentas de pagar el IRPF, se van a elevar un 4,1%, "en la misma medida que la subida media de los salarios a nivel nacional".

46 euros frente a los 4.400 a los ricos

Las críticas al anuncio a bombo y platillo de Alfonso Rueda no se hicieron esperar. Las primeras llegaron del secretario general del PSdeG, Valentín González Formoso, quien comparó la rebaja a "los más ricos" con la que le ofrece la Xunta a la clase trabajadora, puesto que mientras a los primeros les otorga "una rebaja de 4.400 euros" a los segundo les concede una "limosna de 46 de rebaja al año".

Esta comparación se completa, según Formoso, con el dato de que la medida anunciada en el Parlamento gallego por Alfonso Rueda significa una deflactación "leve del IRPF" de las rentas de menos de 35.000 euros, es decir, una "rebaja del 4% para la clase media y trabajadora", frente al "darle más a los ricos" cuya rebaja alcanzará el 50 por ciento de los alrededor de los 7.700 millonarios gallegos a los que beneficiará. 

Un dato incorporado por el líder de los socialistas gallegos en su balance de la apuesta de rebaja fiscal del presidente de la Xunta es el de que ya en la actualidad las personas más pobres están exentas de pagar el IRPF, por lo que a ellas no les beneficia en una situación de crisis de precios como la que se vive ahora mismo. Formoso, por el contrario, insistió en que con el dinero que se pierde con la rebaja fiscal "a los millonarios" y que se cifra en alrededor de 34 millones de euros, "podrían hacerse políticas sociales para ayudar a estas personas". 

Precisamente, en contraposición a la "senda propia" anunciada para Galicia por Rueda en materia fiscal, el secretario general de los socialistas gallegos mostró como en días anteriores su "preocupación" por lo que llamó "seguidismo" del presidente gallego hacia Ayuso y Feijóo, agregando que al final "somete Galicia a lo que diga la Comunidad de Madrid", concluyendo que por esto su Gobierno es "absolutamente indigno para los gallegos".