Dos informes de ADN apuntan de manera directa a dos de los detenidos por su implicación en la muerte de Samuel Luiz como los dos principales sospechosos. Lo ha explicado esta mañana el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, en una rueda de prensa en la que también han estado presentes la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María RIvas; el jefe superario de Policía de Galicia, José Luis Balseiro; así como el comisario jefe de la brigada de la Policía Judicial, Pedro Agudo.

La comparecencia se ha convocado de manera urgente hoy mismo al conocerse el levantamiento del secreto del sumario y, según explicó Miñones, en el marco del "compromiso de informar puntualmente, con veracidad y transparencia” sobre el suceso.

El delegado del Gobierno aprovechó la presencia de los medios de comunicación para agradecer públicamente el trabajo y el esfuerzo a la Policía Nacional dentro del objetivo de “llevar ante la justicia a los culpables”. No obstante, a pesar de lo asegurado este lunes, también ha dejado claro que las pesquisas continúan y que la investigación "sigue abierta", añadiendo que la Policía trabaja "para el total esclarecimiento de los hechos.

Hasta el momento, según los datos que facilitó, se han realizado hasta 41 pruebas testificales, aclarando que, precisamente, el levantamiento del secreto del sumario se ha producido tras entregar a la jueza los citados “informes de ADN que implican directamente” a los dos principales sospechosos.

Haciendo un resumen de lo ocurrido, José Miñones detalló que la agresión tuvo lugar en un recorrido de unos 150 metros entre las 02.58 y las 03.04 horas, durante 6 minutos, de la noche del 2 al 3 de julio. “Quiero señalar que esta agresión podría haber tenido incluso una segunda víctima. Les hablo de Ibrahima, el ciudadano senegalés que le protegió sin éxito y que incluso lo cubrió con su cuerpo, recibiendo también golpes que pudieron acabar con su vida. En esta acción estuvo acompañado por su amigo Magatte”, ha destacado.

Hasta el momento, seis personas han sido detenidas, todas con edades comprendidas entre 16 y 25 años. Cuatro son adultos de los que tres varones han ingresado ya en prisión, y una mujer que se encuentra en libertad, aunque con medidas cautelares. Otros dos son menores, ingresados en un centro de internamiento. Todos ellos están procesados por su supuesta participación en delito consumado contra la integridad física de Samuel Luiz y otro en grado de tentativa contra Ibrahima.

El delegado del Gobierno ha destacado “la acción solidaria y humanitaria que protagonizaron con riesgo para sus propias vidas” los dos hombres de origen senegalés. Ese comportamiento les ha servido para lograr el permiso de residencia y trabajo.

A modo de conclusión, Miñones ha vuelto a resaltar una vez más la acción policial. Según sus palabras, "para llegar hasta aquí, ha sido fundamental el trabajo minucioso de la Policía Nacional, en concreto de la brigada provincial de la policía judicial, que ha demostrado absoluta profesionalidad y rigor, sin dejarse contaminar, y siendo sensible a una dura y fatal realidad”.