Mañana Galicia vivirá una intensa jornada de huelga en la sanidad pública que, además, se espera que tenga un seguimiento importante, no en vano, está convocada por dos de las organizaciones profesionales de médicos y facultativos más importantes.
Se trata de los sindicatos O'MEGA y SIMEGA que hace ya algunas semanas marcaron en rojo el día 3 de octubre. El motivo, según han recordado esta misma mañana, es 'Por un Estatuto Propio y Por la Recuperación de la Calidad Asistencial'.
En el comunicado hecho público a primera hora de hoy, lo primero que hacen los convocantes es pedir “la comprensión de los ciudadanos por las molestias que puedan causarles”. A su vez, apelan al colectivo de médicos de Galicia para que se sume a la jornada “ante la acumulación de demandas históricas que no han recibido la atención necesaria por parte de las administraciones competentes, el Ministerio de Sanidad y la Consellería de Sanidade de la Xunta”.
A través de esta huelga, ambos sindicatos se han marcado como objetivo el de dar a conocer con claridad “los múltiples problemas a los que nos enfrentamos” en el ejercicio de la profesión. Entre esos inconvenientes enumeran “la sobrecarga laboral, condiciones indignas de trabajo y una creciente desvalorización del personal médico y sanitario en general”.
O’MEGA y SIMEGA consideran que esta es una “lucha de todos”, de ahí que soliciten el respaldo y la participación; asimismo, muestran su convencimiento de que “solo unidos” serán capaces de “exigir con fuerza y legitimidad” los cambios que necesitan y merecen.
Por el contrario, mantenerse en la indiferencia ante la convocatoria de mañana viernes tendrá como consecuencia la extensión de la “injusticia y el deterioro de nuestro sistema de salud”, con el conocimiento de que “sin unas condiciones adecuadas no pueden ejercer su profesión con excelencia ni garantizar el bienestar de sus pacientes”.
Cabe recordar que este martes, último día del mes de septiembre, los máximos responsables de ambos sindicatos publicaron la “carta abierta” que enviada al conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño en la que, para empezar, reconocen que su llegada al frente de este departamento fue vista de manera positiva (“Aplaudimos su llegada con la esperanza de que diera un impulso a las necesidades perentorias que tiene el sistema de salud en Galicia”).
Sin embargo, esa “esperanza”, según dicen, se quedó en agua de borrajas ya que “no hemos apreciado avance alguno”.
Éxodo, estrés y malas condiciones
Ahora mismo la situación es “insostenible” como recuerdan en la misiva, debido a que los compromisos adquiridos por la Xunta a raíz de la gran huelga de abril de 2023 no se han cumplido.
De esas condiciones deriva, por ejemplo, que no haya cesado el “éxodo de facultativos bien formados a otros países en busca de unas condiciones laborales justas, o que el índice de médicos “con síndrome de Burnout y cuadros de estrés y ansiedad” no pare de crecer.
También citan en la carta remitida al conselleiro de Sanidade la “sobrecarga de trabajo”, tanto en Primaria como en Atención Hospitalaria, en las Urgencias Hospitalarias y en las extra hospitalarias, algo que se ha vuelto “insoportable”.
A lo anterior también añaden unas “condiciones laborales” y “derechos de los médicos y facultativos” que “parecen no importar lo más mínimo a las administraciones”, achacando esto a que otros colectivos sanitarios “son más numerosos” y, a su juicio, “proporcionan una mayor rentabilidad política”.
“El desasosiego es tal, que nuevamente nos hemos visto obligados a convocar una jornada de huelga para alzar la voz y que nuestras reivindicaciones sean escuchadas en Santiago y en Madrid”, señalan los firmantes.
“Los médicos y facultativos no podemos estar sometidos ni un minuto más al agravio que sufrimos respecto al resto del personal sanitario” del Servizo Galego de Saúde, Sergas, indican, agregando que “es intolerable que seamos los únicos que no podemos disfrutar de la jornada laboral de 35 horas”. Critican también el hecho de que “seamos sometidos a la imposición de las guardias, que además se retribuyen por debajo del precio de la hora ordinaria”.
A lo largo del escrito enviado al conselleiro recuerdan diferentes puntos que piden mejorar tanto en sus condiciones laborales como relacionadas con la prestación del servicio, para concluir que dichas demandas “no son desmedidas ni inasumibles para las administraciones, son sensatas y justas, buscan la conciliación laboral de médicos y facultativos preservando la calidad asistencial para la población general”.