El cruce de declaraciones entre el Gobierno central y la Xunta de Galicia a propósito de los pellets que llegan a playas de la región desde mediados de diciembre continúa. Mientras Asturias, tras detectar en alguno de sus arenales estas bolas de plástico, ha decidido subir el nivel de alerta y, por tanto, solicitar la colaboración del Ejecutivo de Pedro Sánchez, el presidente gallego en funciones, Alfonso Rueda, se ha resistido hasta este mismo mediodía.

Los datos, sin embargo, poco a poco le van acorralando en sus propias contradicciones. La más llamativa la relacionada con el momento del conocimiento por parte de la Xunta de la llegada de estos pellets a las costas gallegas. 

A toda la controversia generada se suma el factor electoral, lo que podría estar detrás de la negativa del candidato 'popular' a subir la importancia de la presencia de este material, por las posibles decisiones drásticas que se vería obligado a adoptar sobre ámbitos tan destacados en Galicia como el pesquero y el marisquero a apenas poco más de un mes de los comicios.

Hasta hoy mismo no se ha atrevido a dar ese paso y elevar el nivel de alerta. La que sí ha sido más contundente en sus acciones, tal y como anunciaron el fin de semana sus representantes, ha sido la organización Ecoloxistas en Acción.

Esta misma mañana, la ong ha presentado en los Juzgados de Noia una demanda penal contra la compañía a empresa armadora propietaria del buque Toconao, con bandera de Liberia.

La denuncia se dirige también contra su capitán. Según ha informado la entidad, la acción judicial, "realizada de la mano de Plademar Muros-Noia", considera a la empresa como responsable de "un presunto delito contra el medio ambiente y los recursos naturales por la afectación de las costas gallegas", a través del vertido de millones de pellets de plástico.

Hasta el momento, el análisis de Ecoloxistas revela que esta marea de bolitas ya ha afectado a 10 espacios protegidos de la Rede Natura 2000, además del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas y el Parque Natural de Corrubedo, al margen de numerosas zonas de costa y playas.

Precisamente, en la demanda presentada este martes se ponen en evidencia "los daños sustanciales a la calidad del agua, de los suelos de las playas y de los animales y plantas de estos ecosistemas", hablando del mismo modo del "riesgo de perjuicios para la salud".

Para la organización ecologista estos pellets, por sus características, "atraen las toxinas próximas absorbiéndolas como una esponja, lo que hace que se conviertan en 'bombas tóxicas'", tal y como han explicado ante los periodistas.

Por su forma y tamaño se convierten en atractivas para aves, peces y crustáceos, que "al ingerirlos, los plásticos entran en la cadena trófica y con frecuencia provocan la muerte del animal que deja de comer al tener el estómago lleno de plástico".

Voluntarios de Ecoloxistas en Acción recogiendo pellets en una playa gallega (Foto: Ecoloxistas).

A pesar de esto, desde el Gobierno central han aclarado también hoy a través del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que este vertido no está generando problemas para el consumo de pescado o marisco. "No existe ninguna noticia ni ninguna información de problemas vinculados a esta situación que deriven en problemas para el consumo de pescado o de marisco de Galicia. Estamos siguiendo el tema sobre la base de las informaciones proporcionadas por la Xunta de Galicia", ha asegurado. 

La demanda presentada hoy en los Juzgados de Noia sigue, según Ecoloxistas en Acción, la máxima de que "quien contamina paga", de ahí que haya solicitado la imposición de una caución o garantía a la empresas de no menos de 10 millones de euros. Con este dinero se permitiría acometer los gastos de restauración de las zonas afectadas.

A su vez, la entidad naturalista ha aprovechado para criticar, una vez más, la "inacción" de la Xunta de Galicia a la hora de adoptar medidas.

Copia del informe de no toxicidad

Por otra parte, en el marco de la polémica en la que están envueltas las administraciones central y autonómica, también este martes el delegado del Gobierno en la región, Pedro Blanco, ha vuelto a reclamar al Ejecutivo que preside en funciones Alfonso Rueda que "facilite copia" de su análisis sobre la toxicidad de los pellets.

En un primer momento, desde el Gobierno de la Xunta se habló de que no existía toxicidad. Sin embargo, tras la primera evaluación de la Fiscalía en la que no descarta indicios de delito medioambiental y de cierta toxicidad, la administración autonómica ha dicho que el citado informe tenía un carácter muy provisional.

Blanco ha insistido en la necesidad de disponer del mismo puesto que se trata de un "desastre medioambiental" cuya incidencia va más allá del lugar "donde se están depositando". A su juicio, "parece que tienen un informe que habla de que esos pellets no son peligrosos, nos gustaría tener una copia", ha añadido. Igualmente ha subrayado que la Fiscalía General del Estado presenta "una opinión distinta" acerca de la toxicidad o no de esas bolas de plásticos que han llegado a toda la costa gallega.

Pedro Blanco ha afirmado que ayer tuvo una nueva conversación con el conselleiro do Mar, Alfonso Villares, para "ofrecer toda la ayuda" estatal y "toda la colaboración" del Gobierno en "la retirada de estos residuos".

Con respecto a la controversia sobre fecha en la que la Xunta obtuvo la primera información sobre los pellets, el delegado del Gobierno en Galicia la ha considerado "absolutamente estéril" al indicar con rotundidad que la administración gallega "tiene conocimiento de este problema medioambiental desde el 13 de diciembre".