En un día marcado por el rechazo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid a la decisión del Ministerio de Sanidad de restringir los movimientos de entrada y salida de la capital y otras 9 ciudades de esta región, en Galicia se habla todavía del edificio que con vigilancia policial debido a los contagios por Covid-19.

El inmueble en cuestión está situado en la calle Alcalde José del Río de Marín, municipio situado a escasos 7,5 kilómetros de Pontevedra y conocido por albergar en su término la Escuela Naval Militar. Esta semana ha sido difícil ver alguna cámara de televisión por la zona buscando información, en el menor de los casos, y morbo, en la mayoría.

Del brote se tuvo conocimiento el pasado sábado. Los últimos datos apuntan a que en dos viviendas diferentes se han detectado un total de seis casos. Todo se inició el fin de semana cuando uno de los enfermos precisó hospitalización. Según informan medios locales, una vez confirmado el primer positivo, los servicios de emergencias se trasladaron hasta el lugar para realizar las pruebas al resto de convivientes.

De manera preventiva, los sanitarios desplazados también sometieron a PCRs a la totalidad de residentes en el edificio, debido a que algunos de los convivientes del primer afectado no habían cumplido de manera estricta las medidas de seguridad. Por tal motivo, se decretó al vigilancia policial las 24 horas con el objetivo de garantizar el cumplimiento de los protocolos establecidos, hasta conocer los datos definitivos de los test.

Finalmente, el resto de inquilinos del inmueble dio negativo, de ahí que ahora mismo estos sí puedan entrar y salir, permaneciendo confinados la media docena de afectados por el coronavirus.

Este tipo de controles están siempre rodeados de polémica por si chocan con las libertades y derechos de las personas a quienes van dirigidos.

En Galicia, cabe subrayar que, a diferencia de lo ocurrido este jueves en Madrid o con anterioridad en otras regiones, hasta ahora, el Tribunal Superior de Justicia ha dado siempre el visto bueno a las medidas adoptadas por la Xunta a través de la Consellería de Sanidade para tratar de frenar la expansión de la pandemia. En materia de limitación de movimientos, la última, tras A Mariña lucense en verano, afecta a los residentes en Ourense y otras localidades de esta provincia.