La tuberculosis bovina sigue centrando las miradas en Castilla y León, mientras PP y particularmente Vox, insisten en relajar las medidas. Sin ir más lejos, el pasado jueves la formación de extrema derecha pedía a Bruselas cambiar la legislación vigente, cumpliendo así con lo que hace cosa de una semana prometió el vicepresidente de la comunidad, Juan García Gallardo.

Han sido semanas intensas, cuyo pistoletazo de salida se podría situar en la resolución de la parte conservadora de la Cámara que la Justicia tumbó a requerimiento del Gobierno Central, quien a su vez limitó el movimiento de ganado.

En ElPlural.com hemos recurrido al Colegio de Veterinarios de Salamanca (ColVetSa) para obtener una visión más científica y una imagen más clarividente de todo lo que está pasando. Su presidente, Antonio Rubio, responde a nuestras preguntas:

PREGUNTA (P): ¿Han tenido algún tipo de reunión con el Gobierno de coalición?

RESPUESTA (R): Sí, pero anteriores a todo esto. En noviembre tuvimos una con el vicepresidente y en diciembre con la directora general. Ahí le transmitimos varias situaciones que ocurren en la profesión, entre ellas parte de esto. Luego, a través de los escritos, los comunicados y las informaciones en los medios siempre he defendido que lo que procede es que se sienten en la mesa todos los sectores-veterinarios, ganaderos, políticos, científicos- y hacer un estudio/revisión.

P: Y después, ¿han pedido a la Junta reunirse?

R: Por escrito no, porque lo único que hemos sabido es a colación sobre la problemática suscitada, defendiendo un poco a los veterinarios, porque era el objetivo que habían puesto, ya que los trabajadores de nuestra profesión no tenían nada que ver en el asunto. La problemática venía por una resolución que habían sacado y que contravenía normativas nacionales y europeas.

P: Sobre lo último, Vox insiste en relajar las medidas, incluso pidiendo que se cambie la actual legislación europea. Todo ello mientras Castilla y León es la comunidad en la que más subió la incidencia entre 2020 y 2022. ¿Es lógica la idea del Ejecutivo, sobre todo de la extrema derecha, a pesar de la evidencia?

R: No somos quién para decir eso. Si la normativa europea se cambia, nosotros solo le daríamos cumplimiento, lo mismo que a la nacional.

Pensamos que el programa ha funcionado durante años porque a nivel nacional se ha bajado muchísimo la prevalencia. Es verdad que hay peculiaridades en determinadas zonas, en concreto en Salamanca y en zonas de extensivo; lo cual induce a que posiblemente el programa deba revisarse y estar abierto para posibles innovaciones, modificaciones o lo que sea necesario. En eso es en lo que se tienen que juntar para fundamentarlo y darlo un marco jurídico que permita plasmarlo ante el Ministerio y ante Europa. Si ellos justifican que hay que dar una vuelta, se cambiaría la normativa y nos la trasladarían para que los funcionarios hiciéramos cumplimiento de ella.
 

El programa europeo ha funcionado durante años

 

P: Hace unos días el consejero de Agricultura, Gerardo Dueñas (Vox), dijo que la sociedad era “demasiado sensible con la salud pública” y que no existe un problema real por la tuberculosis bovina. Que “no podemos llevar al extremo algo que, hoy por hoy, es muy bajo”. ¿Qué opinión les merecen estas declaraciones?

R: Lo único que puedo decir es que la tuberculosis está tipificada como zoonosis, y toda zoonosis es un problema de salud pública. Mientras los científicos digan que es tal, tenemos que verlo así.

No sé el asesoramiento que ha tenido el consejero porque me consta que en temas de sanidad animal somos los veterinarios los que tenemos esa reserva competencial, y no creo que haya contado mucho con el servicio veterinario de la Junta. Me produce un poquito de incredulidad. Sí es cierto que la tuberculosis en los países desarrollados tiene una incidencia pequeña, pero en los países subdesarrollados, no.

Me producen incredulidad las palabras del consejero

 

P: ¿Consideran que los políticos están más puestos en ver quién lleva razón y, sobre todo, negando la evidencia en muchas ocasiones, como en este caso hace Vox?

R: Nosotros en todas las comunicaciones que hemos hechos hemos dicho que este problema parte de una torpeza de una parte del equipo de Gobierno de Castilla y León.

Es evidente que una resolución de esa magnitud, que contraviene normativas nacionales y europeas no se puede sacar y que, como nosotros decíamos en el Colegio, hasta el más ignorante sabía que eso se iba a tirar para atrás. De hecho, ha sido así con el auto del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL). A pesar de que ellos sigan insistiendo, es lo que hay. Considero que es un problema político, sin entrar a valorar que un gobierno sea de una ideología y otro de otra. Entiendo que ellos se lanzan piedras, pero nosotros lo único que tenemos que hacer es defender a los veterinarios, que en todo momento han cumplido con el ordenamiento jurídico.

P: ¿Puede decirme en cuánto se valoran las pérdidas durante el tiempo que el ganado ha estado parado?

R: No tengo datos. No trabajo en la Consejería de Agricultura y Ganadería, pero somos conscientes de que ha perjudicado mucho al sector ganadero, sobre todo; también al veterinario como encargados de supervisar las ayudas y todo lo que concierne.

Está claro que esto hunde un poquito más la imagen de nuestra carne, por lo que sí queremos mandar un mensaje de tranquilidad a la sociedad de que las carnes no son tuberculosas, porque pasan una serie de controles que también realizamos los veterinarios que estamos en la Consejería de Sanidad. Podemos asegurar que todo el producto que sale tiene unas garantías y una seguridad alimentaria. Además, nos preocupa que se hayan limitado los movimientos comerciales pecuarios.

Las carnes no son tuberculosas, pasan sus controles y salen con garantías

P: ¿Por dónde pasa la solución?

R: Por sentarse todas las partes en una mesa, elaborar un estudio de la situación y llevarlo por los conductos reglamentarios.