En el Partido Popular se ha optado por cerrar filas y evitar decisiones en caliente tras el pésimo resultado cosechado el 14-F. Las elecciones catalanas no han aliviado a un Pablo Casado que camina por una cuerda floja sin protección. El liderazgo del jefe de los conservadores está en cuarentena y así lo hace saber Cayetana Álvarez de Toledo.
La que hasta el verano pasado era portavoz parlamentaria del Partido Popular ha concedido una entrevista al diario El Mundo para analizar los resultados de las catalanas en clave conservadora. Álvarez de Toledo no ha medido ni un ápice sus palabras, ha cargado su arco y ha apuntado hacia Pablo Casado.
Cree que el líder del PP es el responsable único de la catástrofe del pasado domingo. Ha explicado que “jamás hubiera aceptado el ofrecimiento de Casado” de encabezar la lista por Barcelona “si no hubiera estado Alejandro Fernández”. Ha detallado que, cuando asumió “el desafió” las encuestas les daban “cero”. Sin embargo, junto con el candidato del PP a la Generalitat se avanzó en un “proceso de reconstrucción y conseguimos el liderazgo del constitucionalismo en noviembre”.
No obstante, Álvarez de Toledo explica que la dirección nacional del PP “trunca abruptamente” la reconstrucción en verano, cuando Casado la cesa como portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso. Estima, por tanto, que el fallo no reside en el “candidato”, sino en la “estrategia errática” del partido, a la que se ha referido como “profundamente equivocada”.
La ex portavoz parlamentaria del PP ha indicado que Casado “ha dejado a muchos votantes desorientados, huérfanos y sin razones para votarnos”. Ha deslizado que la campaña dibujada por sus compañeros se ha enfocado en la “resurrección del catalanismo” en lugar del refuerzo del “constitucionalismo”, aunque desconoce los motivos que llevaron al líder del partido a esa senda.
Un liderazgo débil
Álvarez de Toledo esboza un liderazgo débil y enumera tres “hitos” para explicar esta catástrofe. El primero de ellos pasa por el discurso de Pablo Casado tras la destitución de Cayetana como portavoz parlamentaria. “Proclama que un partido no puede pretender que la sociedad se parezca a él y es la renuncia a dar la batalla ideológica y cultural”, ha explicado.
La responsabilidad de todo esto no es de Bárcenas, no es de Rajoy, no es de Alejandro, no es de la abstención.
El segundo de los “hitos” que encuentra tiene su origen en el discurso de Pablo Casado en la moción de censura presentada por Vox. “Se rompió con los simpatizantes de Vox, no sólo con el partido”, ha lamentado Álvarez de Toledo, quien enmarca el tercer motivo en las declaraciones del líder de la formación sobre las cargas policiales del 1-O.
“Hemos pedido perdón por hablar demasiado del proceso, cuando hablar del proceso es hablar de democracia y libertad”, ha explicado. Álvarez de Toledo considera que el “desafío separatista” no se soluciona con “promesas de financiación” y señala que lo más “insólito” ha sido “insinuar que las fuerzas de seguridad se excedieron el 1-O”.
Decepcionada con Casado
Para Cayetana Álvarez de Toledo, esta cronología es una prueba irrefutable de que Pablo Casado ha acreditado su “incapacidad” para encabezar la reconstrucción del espacio constitucionalista, lo que ha definido como el “principal desafío español”. Estima que el líder del Partido Popular “se ha dejado jirones de credibilidad” y le responsabiliza de todas las decisiones tomadas en campaña por su “presencia constante”.
“La responsabilidad de todo esto no es de Bárcenas, no es de Rajoy, no es de Alejandro, no es de la abstención”, continúa Álvarez de Toledo, quien también ha salvado de la quema a uno de sus archienemigos en Génova, Teodoro García Egea. La ex portavoz parlamentaria ha agregado que, “con dolor personal y político”, Pablo Casado “ha defraudado las esperanzas depositadas en él” y a quienes “nos unimos a un proyecto” con la confianza de que aunaba “coraje, convicciones y capacidad de desafío”.
