El portavoz del PSOE de Madrid en la Asamblea, Juan Lobato, ha preguntado este jueves en la sesión de control a Isabel Díaz Ayuso sobre la situación de la universidad pública en la región, poniendo el foco en la Universidad Complutense (UCM), una de las más importantes a nivel autonómico y del país que, sin embargo, se ha visto expuesta a polémicas en los últimos años.

A lo largo de la semana, el PP de Madrid ha llamado a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a comparecer en una comisión de investigación a la que tampoco descartan pedir que acuda el líder del Ejecutivo. Entretanto, la lideresa regional obvia las sombras que se levantan sobre su currículum universitario y sobre las que nunca ha dado explicaciones.

El trato de la Comunidad de Madrid a la universidad pública

En el maremágnum, el diputado socialista ha querido preguntarle desde su escaño si “piensa que la universidad pública es importante”. “Le importa cero, tiene un plan bien pensado para desmantelar la pública, igual que el que tiene en sanidad y educación pública. ¿Por qué en Madrid se puede estudiar Medicina en más privadas que en públicas?”, ha cuestionado, centrando el tiro en esta Ciencia.

A continuación, el secretario general de la formación ha esgrimido que en Madrid hay quien se tiene que “endeudar” para poder estudiar; y que eso “no es libertad”, sino que “representa lo contrario”: “Lo peor es que lo hace porque cree en ello (…) Yo la acuso de pensar que hay quienes tienen más o menos derecho a acceder a la universidad. Quien tiene derecho a pagárselo que vaya, y quien no que haga otras cosas”.

Lobato ha lamentado que el PP esté “expulsando a la clase media de la universidad” amparándose en que los “se están transfiriendo menos fondos que hace 15 años” y que hay familias que no tienen para pagar los 1.200 euros que en ocasiones cuesta. “(A los centros) a veces no les da ni para pagar la calefacción”, ha señalado. Todo a la vez que los esfuerzos de la presidenta se centran en “hablar de ETA o Venezuela”.

En su réplica, Ayuso ha vuelto a acusar el Gobierno Central de “degradar” los estudios públicos. “Me lo llevo, monto un chiringo para tener algo en lo que trabajar y beneficiar a las empresas que han formado parte de una cátedra que no tiene ni alumnos”, ha emitido sobre le cátedra de Gómez.

Asimismo, la lideresa ha defendido que su Comunidad es la que más aporta a este aspecto y que “la gente no se queda sin estudiar por un tema económico”, sino por las actuaciones, dice, de Moncloa. “La UCM es la docta, la universidad central, y ustedes la han degradado (…) Tendrán que dar explicaciones. Son un partido estalinista”.

Ayuso pide explicaciones, pero ella no las da

Ayuso pide explicaciones, pero ella no las da. Ni una sola palabra ni prueba sobre su currículum académico después de que este periódico -en un trabajo conjunto y exhaustivo con genoveses.net- publicara el expediente académico de la responsable regional hace unos meses.

Sobre aquello, la presidenta de Madrid directamente mintió, pero no es la única cuestión frente la que hay dudas respecto de la trayectoria estudiantil de la representante número uno de Sol. Este jueves ElPlural.com recogía que hay un título de la ‘popular’ que la UCM no recoge en su lista de “alumnos ilustres”, pero el portal de transparencia de la Asamblea y la web del PP, sí. Ante dicha cuestión, este medio de comunicación se dirigió al equipo de la presidenta sin obtener explicaciones y se remitió a la facultad, también sin éxito.

En la esfera privada, las dudas sobre la presidenta también se centran en un máster. La titulación que empezó a hacer caer a Cristina Cifuentes -en su caso en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC)- tampoco está exenta de controversia en Isabel Díaz Ayuso.

En su caso, se trata de un máster en “Comunicación Corporativa” o “Comunicación Política y Protocolo” -en función de dónde se busque la información- obtenido en el Instituto Séneca. Este medio de comunicación se dirigió al centro privado para esclarecer el escenario y, desde allí, tal y como había podido comprobar este periódico accediendo a una antigua base de datos, se refirieron a un “curso”, no a un máster.

A todo ello hay que sumarle la polémica que trajo el nombramiento de la actual presidenta madrileña como alumna ilustre de la Complutense. El reconocimiento de Ayuso, la única persona del listado que consiguió acceder a este ‘salón de la fama’ “a propuesta del Rectorado”, generó protestas en su día y fue el detonante de que este periódico comenzara a publicar informaciones que comprometían a la presidenta en este apartado.