Un suspiro de alivio ha exhalado las redacciones de medio país, y sobre todo, las del Huelva Información al hacerse pública la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). Se trataba de uno de los fallos más esperados que absuelve a la onubense Raquel Rendón por unos hechos ligados a su labor periodística.
Sobre Rendón pesaba una condena de dos años de cárcel por revelación de secretos, en base al artículo 197.3 del Código Penal. La periodista publicó en su diario informaciones con datos extraídos del sumario del crimen de Laura Luelmo, asesinada brutalmente por su violador y secuestrador, Bernardo Montoya. Un suceso doloroso, pero también mediático, que fue objeto de una extensa cobertura nacional.
Pero el crimen que tuvo lugar en El Campillo, Huelva, tuvo unas insospechadas implicaciones para el derecho ciudadano a la información veraz, la labor periodística, y sobre todo para la periodista onubense que resultó condenada a prisión y multada por publicar detalles del sumario del caso.
La sentencia del tribunal consideró qué la información daba detalles no necesarios, es decir, el Tribunal valora qué información es relevante y cuál no lo es. La parte condenada recurrió al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. La sentencia se arrogaba el derecho de definir qué era y qué no era noticiable.
La condena del Fiscal jefe de Huelva supuso un paso inédito en la historia del periodismo y la justicia patria y que implicaba cárcel para una profesional. No olvidemos, la periodista solo publicó información veraz relacionada con el asesinato y el resultado de la autopsia a la víctima. La familia de Laura Luelmo respaldó la acusación contra la periodista.
Sin embargo, un paso judicial de este tipo implica un insólito precedente para salvaguardar la libertad de información, un derecho constitucional (artículo 20) que se ve salpicado por la decisión que tomó en su momento la Sección Tercera de la Audiencia de Huelva. El sector reaccionó ante esta resolución judicial controvertida y peligrosa para el derecho a la información.
Raquel Rendón es una periodista reputada de las secciones regionales, ha sido premiada en numerosas ocasiones por sus trabajos en Huelva. Las asociaciones de la Prensa andaluzas respaldaron a la profesional rechazando una sentencia (96/2023) que amordazaba la libertad de prensa.
Las entidades recordaron que estábamos ante una “práctica habitual en el ejercicio periodístico relacionado con los tribunales”, en alusión a la revelación de información sumarial. Por su parte, la Audiencia Provincial entraba a valorar que la información de Rendón era innecesaria e irrelevante para el interés público y que afectaba a la intimidad de la víctima y su familia. Pero recordemos, la información era veraz y no existía secreto sumarial sobre la causa.
Los profesionales de la información han alertado sobre el peligro que supone esta sentencia para el derecho a la libertad de información, la posibilidad de una censura al trabajo ya publicado y la invitación a la autoncesura para evitar consecuencias penales. La Justicia persiguiendo al mensajero, no al problema, como concluyó la FAPE, “la justicia tiene el deber de proteger y defender la información veraz, nunca perseguirla o castigarla”.
Un aviso a navegantes
Ahora, el TSJA viene a enmendar el alcance de la sensibilidad periodística de la Audiencia onubense. El TSJA aclara que esa sentencia no especificó sobre la fuente de la información de la periodista, que no era otra que el sumario. El trabajo de Rendón se hizo con plural contenido de las diligencias judiciales del Sumario que se instruía, "de carácter reservado, y las dio a conocer con acotaciones literales a través de diversos artículos periodísticos”. Algo que pasa continuamente en la prensa especializada.
En definitiva, el TSJA asume el recurso de la defensa de la periodista, y es que las noticias veraces no encajan en el delito de revelación de secretos, por un lado y por otro, recordemos: La Constitución reconoce y protege los derechos que protegen la libertad de información.
Las reacciones no se han hecho esperar, dirigentes y representantes del sector han dado la bienvenida a la medida del TSJA. Rafael Rodríguez, presidente de la Asociación de la Prensa de Sevilla destaca que “La libertad de información triunfa. El periodismo honesto y veraz y la ciudadanía que lo recibe están hoy de enhorabuena”.
También compañeros como Quico Chirino destacan el hecho de contar con “magistrados de altura intelectual y reflexiva que han enmendado una sentencia de la Audiencia de Huelva que nos devuelve la libertad a los periodistas y, sobre todo, el derecho a los lectores”. La propia protagonista de la noticia se hacía eco, de manera discreta, de la noticia en redes. Atrás queda un año en el que, por ejercer su trabajo y por exceso celo de un Tribunal, ha convivido con el peligro de ingresar en la cárcel.