Tenía solo 24 años, era de nacionalidad noruega, hacía turismo en Marbella y murió en la tarde del viernes 14 al precipitarse desde un noveno piso de la ciudad mientras se había 'selfis', alguno de los cuales ya había subido a su cuenta de Instagram.

Al parecer, había sacado parte del cuerpo fuera del antepecho protector de la terraza, con el fin de que en la imagen pudiera verse mejor la panorámica de la ciudad, cuando perdió el equilibrio y cayó al vacío desde una altura de unos 30 metros, en un ático la calle Pedro José Vera, en el centro de Marbella.

Según ha adelantado el diario Sur, la investigación policial apunta de modo inequívoco a un accidente. El servicio de emergencias 112 acudió de inmediato al recibir la primera llamada, sobre las ocho y cuarto de la tarde, pero no pudieron hacer nada para salvarla.

Según parece, sus amigos ni siquiera se dieron cuenta de lo que había sucedido hasta que la propia Policía Local les informó del suceso. Según las diferentes fuentes consultadas por Sur, la joven había conocido a sus anfitriones durante sus vacaciones en Marbella, estuvieron almorzando juntos y ellos la invitaron a su casa a tomar una copa.

Según las primeras pesquisas, la infortunada joven salió a la pequeña terraza a fumar y a hacerse algunas fotos y vídeos para sus redes sociales, que publicó en Instagram antes de morir.