Terremoto en la política andaluza: la difusión de un audio del vicepresidente de la Junta diciendo que sería “estúpido aprobar un presupuesto en año electoral” dinamita el discurso oficial del Gobierno conservador según el cual si el PSOE se niega a pactar las cuentas de 2022, el presidente se vería forzado a adelantar las elecciones, una vez que Vox ha dejado claro que no dará su voto a favor por los inumerables incumplimientos de lo pactado con San Telmo.

PSOE y Unidas Podemos por Andalucía han coincidido en su valoración de las declaraciones de Marín, hechas en julio ante su grupo parlamentario, aunque se han conocido hoy a través de la cadena SER. La portavoz socialista Ángeles Férriz ha dicho que su partido no volverá a sentarse a hablar de presupuestos con un Gobierno que ha mentido a todos los andaluces: “Nunca han querido pactar y se han aprovechado de la buena fe del PSOE y de los propios medios de comunicación”.

La secretaria general de Podemos Andalucía, Martina Velarde, no ha sido más indulgente. Ha pedido la dimisión del vicepresidente y ha glosado lo sucedido con estas palabras: “Hoy nos despertamos con unos audios del Gobierno andaluz que son infames. En el peor momento en décadas no quieren aprobar los Presupuestos como estrategia electoral. Juegan con el pan de los andaluces porque su objetivo no es Andalucía, sino sus sillones”.

El coordinador regional de Izquierda Unida, Toni Valero, se ha pronunciado en el mismo sentido: “El proceso de negociación de los presupuestos era una farsa; el Gobierno ha estado instrumentalizando a Andalucía. Por eso ya presentamos una enmienda a la totalidad. La negociación ha sido un fracaso intencionado porque Moreno no tiene entre sus prioridades la recuperación de Andalucía; lo único que tiene en la cabeza es la calculadora electoral”.

Desde Vox, Jorge Buxadé afirmaba: "Juan Marín debe dimitir hoy mismo. Y deben convocarse elecciones inmediatamente. Los andaluces no se merecen ni un gobierno que pacte con laPSOE ni un gobierno que juegue a ser heredero fiduciario del régimen socialista". El partido ultra también ha dado por rotas las negociaciones presupuestarias.

En su discurso ante el grupo parlamentario, Marín también dijo que "al PSOE solamente le queda una jugada, que es demostrar que puede ser útil de alguna forma en esta legislatura y si le quitamos esa posibilidad (...) pues al final conseguimos pleno. Con esa estrategia tenemos que jugar hasta el final".

Esta mañana, en declaraciones al diario ABC de Sevilla, el vicepresidente de la Junta ha intentado, con argumentos de regular peso, justificar lo que había afirmado en verano:

“Con los datos de junio -ha dicho- era una estupidez aprobar el presupuesto porque sólo teníamos los datos de la ministra Montero y suponían un recorte de 2.300 millones de euros en la parte autofinanciada. Ahora sabemos que van a llegar más de 5.000 millones de euros de fondos europeos y es nuestra obligación como Gobierno presentar ese presupuesto y aprobarlo. En ese escenario iba a haber recortes en sanidad y educación; ahora se ha hecho una arquitectura del presupuesto con los fondos europeos. Ya dije que el PSOE y Vox no van a apoyar los presupuestos de la Junta con cualquier excusa. Y lo mantengo”.

Pese a la justificacion esgrimida por Marín, cuando se grabó el audio de marras era vox populi que una gran parte de los fondos europeos iban a ser gestionados por las comunidades autónomas, que llevaban meses exigiendo su participación.

De hecho, en la Conferencia de Presidentes celebrada a finales de julio en Salamanca el presidente Pedro Sánchez anunció que este año se distribuirían 10.500 millones de euros a las autonomías, es decir, un 55,5% de los 19.036 millones que España iba a recibir de la Comisión Europea en 2021. Difícilmente habría podido ser distinto en 2022. 

En su rueda de prensa de hoy la portavoz del grupo socialista, Ángeles Férriz, lo ha tenido fácil para justificar la negativa de su partido a sentarse de nuevo con los negociadores del Gobierno, a quienes ayer trasladaron una propuesta bastante asequible que entrañaba un gasto de 967 millones sobre un presupuesto de 43.000.

“Moreno Bonilla -ha dicho la portavoz- es el presidente del Gobierno de la mentira. Las declaraciones de Marín confirman que es todo una mentira. Llevan desde julio apostando por la prórroga para quitarle al PSOE la oportunidad de ser útiles, con su hoja de ruta muy marcada. Ellos han ensuciando la política de esta manera intolerable. Han convertido el presupuesto de Andalucía, la ley más importante, en un mero instrumento al servicio de los intereses personales de Moreno Bonilla. La mano que tendió Juan Espadas era una mano sincera. Creíamos posible llegar a un acuerdo, pero ya no vamos a formar parte de este engaño masivo. No vamos a formar parte de una negociación que jamás ha existido. No vamos a sentarnos más a hablar de presupuestos. Presentaremos una enmienda a la totalidad”.