Moreno Bonilla se presentó a las elecciones prometiendo mejorar la sanidad en Andalucía y reducir las listas de espera, incentivando a todos los profesionales. A día no ha cumplido nada de lo prometido. Los centros de salud siguen cerrados para atención presencial, las listas de espera se han disparado y los únicos que siguen haciendo negocio con la pésima gestión del gobierno andaluz es la sanidad privada.

El Presidente andaluz se comprometió en campaña a que el tiempo máximo de la primera consulta especializada en el hospital serían 60 días. Este plazo no se cumple en ningún hospital andaluz y en algunos hospitales es casi el triple. Están jugando con la vida de la gente por no contratar más sanitarios.

Si se analizan las listas de esperas para obtener una cita con un médico especialista a nivel nacional, Andalucía se encuentra actualmente entre las regiones donde el tiempo medio de espera es mayor. En España la media es de 92 días, mientras que en Andalucía se alcanzan los 132 días.

Otro dato significativo es el tiempo que se tarda en obtener una cita para poder operarse, otro buen indicador de las políticas sanitarias. De media los españoles están 133 días pendientes de la llamada que les dé una cita para operarse, pero en Andalucía hay que esperar casi el doble, concretamente, 212 días.

Es significativo que en Andalucía las pruebas analíticas de primaria estén tardando para ser extraídas más de 20 días, cuando antes estas situaciones de tardanza eran publicitadas en todos los medios de comunicación. Pues bien, en primaria se tardan dos semanas para hablar con tu médico de familia, más tres semanas de espera que te extraigan la muestra de sangre y una semana para que estén los resultados y una nueva cita. En total suman 8 semanas.

Ocho semanas de inatención a patologías que pueden complicarse en la salud de un ciudadano. Esta tardanza en ser atendidos acarrea la aparición de cánceres, tumores y otras graves patologías detectadas muy tardíamente.

Recibo casi a diario mensajes, correos y escritos en redes de muchos ciudadanos que se quejan de dicha tardanza, como la de un vecino de Cómpeta que desde hace más de un año está esperando una cita para el neurólogo, fue diagnosticado de Párkinson y aún sigue esperando. Una verdadera lástima.

María, una vecina de Almogía me escribe para contarme que su marido estuvo en el médico en enero de 2020, le mandaron una prueba que tardaría 6 meses, estamos en mayo de 2021 y aún sigue esperando dicha prueba.

Ángel, vecino de Ronda señala que lleva un año detrás de una cita con el nefrólogo por primera vez. La última vez lo reclamó en noviembre, aún está a la espera o Carolina de Sevilla que lleva 13 meses esperando una ecografía de tiroides.

Sergio desde Huelva denuncia que su padre lleva 7 meses esperando para una consulta en dermatología y a día de hoy ni siquiera tiene fecha o Dioni en San Pedro de Alcántara denuncia que lleva esperando 20 meses para que lo vea el especialista de digestivo en el Hospital Costa del Sol y aún no se sabe nada.

Ante este desastre de gestión sanitaria ¿qué ha hecho Moreno Bonilla? Lo único que ha hecho ha sido destinar más dinero a los conciertos con la sanidad privada. Una cantidad que se cifró en 452 millones de euros. Su objetivo es recurrir a centros privados para aliviar la lista de espera de operaciones y pruebas.

¿Por qué no destina ese dinero a la pública y mejora la atención sanitaria en Andalucía? De esta forma Moreno Bonilla podría mantener los refuerzos sanitarios que se contrataron para hacer frente al virus en lugar de mandarlos a casa.

La realidad es que las listas de espera apenas bajan, debido a que muchos pacientes han rechazado la alternativa de la privada, puesto que prefieren operarse en la pública. No obstante es cierto que las clínicas privadas están a rebosar y obteniendo pingües beneficios.

Moreno Bonilla debe tomarse de una vez por todas en serio la salud de los andaluces y andaluzas, debe acabar con las listas de espera generadas por la pandemia y debe dejar de favorecer con millones a la privada y destinarlo a la pública.

El Presidente andaluz sigue sin cumplir ni uno solo de sus compromisos con los que se presentó a las elecciones. Tampoco en materia de salud. Ni ha mejorado la sanidad ni ha reducido las listas de espera ni ha mejorado las condiciones laborales de los sanitarios ni siquiera les paga los que les debe desde 2019.

Miguel Ángel Heredia Díaz
Senador del PSOE por Málaga