Laura Gómiz, expresidenta de Invercaria, empresa pública de la Junta de Andalucía a la que se le ha acusado con pruebas procedentes de una grabación manipulada por alguien muy cercano al PP, ha desvelado en una entrevista a la Cadena SER que el objetivo de todo ello es influir en la campaña electoral en beneficio de los populares y en contra de la Junta de Andalucía.

Demostrado que la cinta está manipulada
Informa hoy la SER que después de sentarse el viernes en el banquillo acusada por mobbing por el ex directivo que le acusó de despedirle por negarse a falsear informes, Laura Gómiz dice confiar en que la justicia le dé la razón. Afirma que el informe pericial que ha aportado en el jucio demuestra, de sobra, que la grabación que presenta quien le acusa está manipulada y que lo que le ordenaba a su subordinado era que subiese expedientes antiguos a una nueva aplicación informática.

Manipulación de la grabación
"La contextualización de esas grabaciones que han salido con mi voz pero para nada con mis pensamientos, estaba en el marco de una nueva herramienta de gestión, y una carga de información de expedientes antiguos, porque todos los nuevos los hacemos desde el principio con esta nueva herramienta". Así lo ha explicado Gómiz, quien hace hincapié en que el informe pericial aportado el viernes en el juicio que la ha sentado en el banquillo por supuesto mobbing contra el ex directivo que realizó las grabaciones, Cristóbal Cantos, ha demostrado que la cinta tiene cortes "que hacen que todo lo que ahí se diga es lo que quieren los manipuladores que se diga, y no lo que yo digo".

Despido por falta de rendimiento
La expresidenta de Invercaria ha explicado que el despido de Cantos, "para nada estuvo motivado por negarse a falsear informes, algo que nunca ordenaría, porque soy una persona íntegra", sino por un descenso en sus rendimientos que había provocado previamente su cambio de departamento. "Dejaba las cosas a medias, no aportaba proyectos. Llegó a plantearme el teletrabajo, algo incompatible con sus funciones... eso motivó su despido", afirma. Pero la ex presidenta de Invercaria, ahora está convencida de que "grabó las conversaciones y luego forzó su despido para aportarlas a un procedimiento laboral, el único en el que de forma inmediata se pueden aportar. Luego decidió filtrarlas a la prensa".

Influir en favor del PP en la campaña
Esta estrategia no tenía, a juicio de Laura Gómiz, otro pretexto que el de influir en la campaña electoral a favor del Partido Popular. "Al principio pensé que yo era la víctima, y él el verdugo, ahora pienso que él es un instrumento, y yo un daño colateral, que el verdugo es quien tiene intereses políticos, y ese es el PP, y que la víctima es la Junta de Andalucía", afirma.

Proceso de ayudas transparente
Laura Gómiz deja claro que el procedimiento de concesión de ayudas en Invercaria es transparente. "Llegaba un inversor, el propio director de Promoción lo recibía (Cristóbal Cantos) y le requería toda la información oportuna para realizar el análisis. Una vez que teníamos esa información se enviaba al departamento de análisis, que emitía un informe técnico que valoraba los pros y los contras de la inversión. Luego, los órganos de gobierno establecidos por estatutos decidían si esa inversión era rentable o no. Yo pretendía que esos análisis estuvieses homogeneizados, y eso me lo permitía la nueva herramienta de gestión que estaba implantando".

Dimitió para defenderse
Laura Gómiz dimitió al conocer la existencia de esa grabación. "Dimití porque sabía que con la forma en la que estaba manipulada la grabación se pretendía hacer mucho daño a la organización y a mí misma, por eso dimití, para evitar el daño y poder defenderme en los juzgados", asegura.

Confía en el buen resultado del juicio
Ahora, la expresidenta de Invercaria, confía en el resultado del juicio. "Creo que el juicio salió muy bien, pudimos demostrar el ámbito de las conversaciones, creo que pudimos demostrar que están manipuladas; confío en que haya justicia y que se difunda la verdad, mi verdad",concluye.