Izquierda Unida ha denunciado una agresión "por parte de un hostelero, ex-portero de discoteca, que arrolló y golpeó en el suelo a una mujer de 60 años", en una de las concentraciones que viene convocado la plataforma para protestar contra el concejal tránsfuga de esta formación que dio su apoyo al PSOE, que hoy gobierna la localidad sevillana. La protestas, reiteradas desde hace meses, exigen la dimisión del alcalde por sostenerse en el cargo gracias al tránsfuga.Tras referirse a la semana pasada como "una de las semanas más negras de la historia democrática de Guillena", Izquierda Unida recuerda en su comunicado que "tiene entre sus postulados el pacifismo, y nuevamente rechaza y deplora cualquier acto de violencia que se produzca, y más si este tiene sus raíces en motivaciones políticas". Y advierte que "ya es hora de poner blanco sobre negro quién violenta, agrede, insulta, manipula y emponzoña la vida de este, hasta el 13 de junio, tranquilo pueblo".IU también
condena "que se le lanzara una naranja, una, que rozó al alcalde", pero a continuación añade que "ellos, de una naranja entre doscientos manifestantes, hacen un bosque de mentiras" y alienta a los suyos a "no caer en sus constantes provocaciones". En todo caso, sí reitera que "si algún miembro, simpatizante o militante de su organización se ha visto implicado en actos violentos será expulsado de la organización".
'SILLÓN SUELDO, DIETAS...'La federación de izquierdas considera que "el PSOE de Guillena, mejor dicho, su cúpula dirigente y especialmente el alcalde Lorenzo Medina es el principal culpable. Lo avisábamos hace mucho tiempo, se estaba construyendo un muro, desde dentro, para dejarlo todo atado y que él desde su sillón se sintiese seguro. Es lo único que le da seguridad, el sillón y sus 40.700 euros más dietas"
Según el relato de los hechos que hace IU, "se ha agredido a dos personas, la última una mujer de 60 años, que estuvo 5 horas en urgencias; se han atacado dos coches y, qué curioso, que ninguno de estos agraviados son del PSOE". También llega a afirmar en su dura nota pública que "un notorio socialista, y prolífico contribuyente a sus campañas, amenazó con sacar la recortada. Afortunadamente –añaden– hoy día tiene las armas retiradas por la Guardia Civil, pero no se le ha expulsado del PSOE, todo lo contrario, su empresa es de las 'afortunadas' con invitaciones del ayuntamiento para realizar obras de 'bajo' presupuesto".
También acusan al PSOE de Guillena de hacer "llamadas amedrentadoras a comerciantes y empresarios para llamar la atención a sus empleados disconformes con el gobierno municipal", aunque aclaran que "la gran mayoría de los que de verdad se sienten socialistas deploran estos métodos".