Tal y como lo hace ‘La Barbacoa’ de Georgie Dann, hay hits que siempre vuelven y este 28M ‘la lista más votada’ no podía faltar en el menú. Evitar pactos entre agrupaciones contrarias es lógico cuando un partido se pronostica vencedor. Pero, proponer que gobierne la lista más votada sorprende cuando no hay pronósticos claros, como en Granada capital. Allí, el alcalde socialista ha dejado a muchos jugadores fuera de juego.

Francisco Cuenca, candidato a la reelección, se ha mostrado a favor de dejar gobernar a la lista más votada. Espeta a la candidata del PP en la capital nazarí, la exconsejera Marifrán Carazo, a que declare su posicionamiento. La apuesta de Cuenca sorprende: primero porque las encuestas no le dan como vencedor en los últimos meses y, segundo, porque contraviene la posición oficial del PSOE.

Desde el equipo de Cuenca aclaran a ElPlural.com que es una medida “por y para Granada”. Señalan a las circunstancias que vivió la ciudad de la Alhambra a partir de 2015 y especialmente en 2019, con una de los mayores esperpentos políticos vividos en el municipalismo patrio. Entonces, el PSOE de Cuenca fue la lista más votada, pero la alcaldía recayó en un pacto a tres entre Vox, PP y el que fue el regidor: Luis Salvador, de Ciudadanos. Aquel pacto se rompió cuando Salvador se negó a ceder la Alcaldía al candidato popular, como se suponía acordado. Tras meses de zozobra, bloqueo y negociaciones, Francisco Cuenca recuperó el bastón de mando en 2021.

Cuenca aclara ahora que quiere evitar la “bronca, los malos rollos y los líos” de unos años que su equipo traduce en mero desgobierno, apelando al voto que piense en términos granadino. En cualquier caso, las encuestas dan la victoria al PP, que además podría apoyarse en Vox si lo precisara. Sin embargo, el PSOE apenas cuenta con asideros, ya que el espacio a su izquierda se encuentra especialmente fragmentado.

Un guante que Moreno Bonilla no recoge

Moreno Bonilla se erige este 28M como el mascarón de proa de todas las candidaturas del PP en Andalucía. Su presencia activa le erige como la marca visible. Pero, a esa imagen de moderado que cultiva y que ya le dio la mayoría absoluta en las autonómicas de 2022 no le conviene asumir que, en ciudades como Granada, Sevilla o Huelva, por ejemplo, su proyecto precisará del apoyo de Vox para gobernar.

Por su parte, Moreno Bonilla se declara sorprendido del desmarque del alcalde granadino, ya que la “cúpula del su partido –el PSOE– se ha posicionado clara y rotundamente en contra”, dice el presidente sobre la posibilidad de apoyar la lista más votada. El líder andaluz esquiva el envite de Cuenca y propone un acuerdo nacional a gran escala entre los dos principales partidos, así como una reforma de la Ley Electoral (LOREG). Sorprende la cautela negociadora cuando fue, precisamente Alberto Núñez Feijóo, quien puso el debate de la lista más votadas sobre la mesa en enero.

Fragmentación en la izquierda

Para este 28M, lo que en 2018 fue una candidatura unida en la izquierda, la de Adelante Andalucía, ahora son tres. De hecho, Granada es la capital de la comunidad con más división en las propuestas electorales a la izquierda del socialismo. Hay candidatos de IU, de Podemos y de Adelante por separado, por eso el equipo de Cuenca apela a los votantes de izquierdas para que concentren en el alcalde el “voto útil para asegurar años de progreso e igualdad”.

El panorama es inquietante para la izquierda en toda Andalucía. Las propuestas que más amalgaman las encontramos en capitales como Sevilla, Málaga, Córdoba, Huelva o Almería. En estas, Podemos e IU sí han alcanzado un mayor consenso. Adelante no concurre en Almería; tampoco en Jaén, donde surgen propuestas en torno a IU y Más País, por un lado, y en torno Podemos por otro. En Cádiz, Adelante Izquierda Gaditana –IU con Kichi­– pugnarán los votos de la izquierda con Podemos.

En el resto de Andalucía, la división de la izquierda continua siendo la tónica dominante. En la provincia de Cádiz, Jerez de la Frontera y Algeciras llaman a más de 100 mil ciudadanos a las urnas. En ambas, lo que era Adelante Andalucía diverge en tres opciones electorales. En Marbella y en Dos Hermanas, municipios también de más de 100.000 vecinos, Adelante se escinde de la unión entre Podemos, IU y Más País.

En las últimas elecciones municipales (2019) la confluencia entre Adelante, Podemos, IU Andalucía y Primavera Andaluza consiguieron un peso relativo de 529 concejales en la comunidad más poblada de España. Este 28M ese escenario se antoja ilusorio.

Un prisma para cada urna

Para el compás moderado con el que Feijóo quiere llegar a las generales de diciembre la presencia de Vox en su orquesta desentona. Pero no es así en las comunidades o municipios donde, como muleta, la ultraderecha permitiría gobernar a los candidatos populares. Y similar asimetría causa en las filas socialistas. “Estas propuestas son un brindis al sol, solo sirven de posicionamiento estratégico”, dice e politólogo andaluz David Ingelmo.

La apuesta de la lista más votada en el ámbito municipalista es menos arriesgada que en las autonómicas ya que, según la Ley Electoral, si no hay acuerdo, automáticamente la lista más votada se erige como gobierno. “Este movimiento puede arrinconar al PP, pero solo en clave andaluza”, explica Ingelmo, señalando a la división del espacio a la izquierda del PSOE.

Respecto al efecto de este tipo de apuestas en la ciudadanía, sería moderado, dado el “hartazgo de la ciudadanía” ante el ejercicio posicionamiento político, que tiene implicaciones tan dispares en el ámbito municipal, autonómico y nacional.

También es “remota” la posibilidad de una reforma de la LOREG entre los grandes partidos para regular la posibilidad de las listas más votadas. Ingelmo lo considera “improbable por el grado de polarización”, sin embargo, sería deseable para quitar peso a los “partidos periféricos, los partidos de pactos”, por ostentar más poder e influencia que el verdadero peso político que ostentan.