“El rayo que no cesa” o la administración de vacunas de forma incorrecta y eludiendo el calendario y normas.

Tal y como desvela la revista 'La mar de Onuba' y recoge 'La Voz del Sur', lo que denominan como “abuso de poder” por parte de la Gerencia de Distrito Sanitario Almería tras haber realizado vacunaciones a personas que no eran de prioridad en el momento en que se le administraron. Otras fuentes también nos corroboran la exactitud de lo ocurrido.

Se da de nuevo la circunstancia de personas pertenecientes a la Consejería de salud de la Junta de Andalucía que han sido vacunadas sin estar incluidas en el calendario como sanitarios de riesgo y en primera línea asistencial contra el Covid. Se trata de profesionales en labores administrativas y de responsables de gestionar, en este caso, el Distrito Sanitario de Almería.

La fuente informante califica a estos responsables como personas “que piensan y creen que es su cortijo”. Esta persona, perfectamente conocedora del área sanitaria mencionada, señala como indebidamente vacunados al Director gerente, Director de Enfermería y Directora de Salud del Distrito Sanitario de Almería.

Los mencionados directores, según esta información, ocupan lo cargos más altos del distrito sanitario de Almería y tomaron la decisión de vacunarse a sabiendas de que no debían. Aunque profesionalmente son sanitarios, no realizan servicios asistenciales y no están “ni en tercera ni segunda y menos en primera línea contra el virus”. Tan solo realizan labores burocráticas como cualquier trabajador de administración. Estos últimos fueron vacunados semanas después y algunos aun no han sido aun vacunados.

Según estas informaciones la decisión de vacunarse adoptada por estos responsables del distrito sanitario de Almería se pudo producir casi al tiempo de llegar las vacunas. Nos hallaríamos pues ante un grave hecho, más aun si cabe, ya que se habrían vacunado días antes de comenzar a administrarla a los ancianos de las residencias. También resultaría que, según las fechas, estas personas ya estarían vacunadas, desde hace días, de la segunda dosis para cerrar el ciclo.

Les hubiera correspondido la vacuna después de los trabajadores sanitarios de primera línea según el calendario de la propia Junta de Andalucía. Un hecho irregular que califican como acordada en “petit comité”, tras llegar la primera vacuna al distrito.

Los nombres de las personas a las que se les administra deberían quedar registrados con fecha y hora en el sistema informático de vacunación.  “Una manera fácil de demostrar todo esto” es entrar en el programa informático de vacunación. Cualquier sanitario (enfermero o médico) puede acceder y comprobar que estas tres personas se vacunaron indebidamente saltándose todas las normas del protocolo de vacunación en las fechas que lo hicieron.