La relación de los seres humanos con las drogas es sin duda controvertida. Ciertas sustancias ha sido utilizadas desde tiempos remotos por chamanes y artistas para abrir las puertas de su percepción. Pero el uso denominado recreativo es el que a la larga se impone y genera peores noticias.

Vuelta a los ochenta

Durante la década de los ochenta, una generación entera fue arrasada por la irrupción de la heroína. Un opiáceo altamente adictivo con el que muchachos de todas las clases sociales buscaban abstraerse de sus problemas. Pero lo único que conseguían era crear otros mayores. Y fallecer de sobredosis, accidentes o SIDA. Cuando parecía que el consumo de opiáceos había descendido, ha aparecido un nuevo compuesto sintético que está disparando los ratios de muertes por sobredosis en Estados Unidos. Se trata de fentanilo.

Fentanilo, 100 veces más potente que la morfina

El fentanilo es un compuesto creado artificialmente a partir del opio. Se trata de un medicamento de uso hospitalario que sobre todo se utiliza en las unidades de cuidados paliativos para combatir el dolor severo. Se estima que es de 50 a 100 veces más potente que la morfina El desastre ha comenzado cuando el fentanilo ha llegado a las calles. Ahí es utilizado por adictos son ningún control y, en la mayoría de las ocasiones, adulterado. La sustancia está provocando una oleada de muertes sin precedentes. Según los datos que publica New York Times, se estima que más de 59.000 personas fallecieron en 2016 por sobredosis de fentanilo. Se trata de un incremento de más del 20% en las muertes respecto al año anterior. Al parecer es tan potente que un oficial de policía tuvo serias complicaciones con tan solo respirar el polvo de un alijo. Oficiales y servicios médicos están advertidos del especial cuidado que deben tener al manipular la sustancia o tratar de adictos al fentanilo.