Sobre el fundador de Wikileaks, que se encuentra en Londres bajo protección de la embajada de Ecuador, pesa una orden de extradición a Suecia, para ser juzgado por denuncias de violación y abusos sexuales presentadas por dos mujeres suecas en agosto de 2010. Sin embargo, él mantiene que es víctima de una "persecución" instigada por EEUU.

Reunión con Assange
Wikileaks, a través de un comunicado, ha asegurado que Garzón se reunió con Assange en la embajada de Ecuador y "mostró su grave preocupación por la ausencia de garantías"en este proceso y "el acoso" al que está siendo sometido, "con consecuencias irreparables para su propia salud física y mental". El líder de Wikileaks lleva más de un mes en la embajada ecuatoriana a la espera de una decisión sobre su petición de asilo.

La defensa de Assange buscará defender tanto a Wikileaks como a su fundador "de los abusos de proceso y de arbitrariedades del sistema financiero internacional que pondrán de manifiesto el alcance real de la operación contra Julian Assange".

Las posiciones de EE.UU y Reino Unido
Asimismo, perseguirá demostrar que "el proceso secreto que se le sigue en los Estados Unidos supone una clara amenaza que vicia cualquier otro proceso, como el que motiva la petición de extradición para ser cuestionado en Suecia, solicitud que aparece como mero instrumento para conseguir aquella finalidad". Wikileaks ha denunciado igualmente la actitud "coactiva" del Gobierno británico que, "sin ofrecer garantías creíbles respecto de Suecia y los Estados Unidos, está moviendo todos los resortes para acabar con una situación que políticamente le perjudica".

La actuación de Garzón contra Pinochet
Finalmente, ha recordado que Baltasar Garzón revolucionó hace dos décadas la justicia internacional al hacer efectiva una orden de aprehensión contra el exjefe de Estado chileno Augusto Pinochet, "lo que permitió importantísimos avances en la lucha contra la impunidad en Latinoamérica y el mundo entero".